La turba comenzó a golpear los turistas sin importarles la nacionalidad de éstos, simplemente por tratarse de extranjeros.
El mexicano Miguel Ramírez Sánchez, quien fue golpeado por la turba en El Cairo durante las manifestaciones que se han agudizado en esa ciudad egipcia, se reporta como estable y de inmediato fue sacado del país por lo que ya se encuentra en Madrid, España.
Vía telefónica y en breves comentarios desde Madrid, este mexicano que estaba de turista detalló que la mañana de este jueves (tiempo de El Cairo) viajaba con un compañero argentino, cuando se toparon con los manifestantes en una de las calles de El Cairo.
La turba comenzó a golpear los turistas sin importarles la nacionalidad de éstos, simplemente por tratarse de extranjeros.
Ramírez Sánchez logró pedir asistencia a la embajada mexicana en El Cairo, que de inmediato, les facilitó la salida tanto al mexicano como al argentino.
La cancillería confirmó que a pesar de las lesiones recibidas por estas dos personas, ambos se encuentran estables y arribaron este mismo jueves a Madrid. Miguel saldrá mañana en un vuelo de Iberia con destino a México.
TEMIÓ POR SU VIDA
Miguel Ramírez Sánchez-Hidalgo, el mexicano golpeado en El Cairo, relató que temió por su vida durante la agresión que vivió por una turba armada, que lo golpearon y despojaron de sus cosas, junto con un argentino, quienes fueron evacuados de Egipto y trasladados a Madrid.
Relató vía telefónica desde Madrid que estaba de turista en Egipto.
"Yo estaba en Luxor, tomé un camión, aunque casi no los hay. Viajé alrededor de 13 horas. Íbamos caminando con un conocido de Argentina, y estos muchachos, armados con palos, estos tipos de no más de 20 años, nos sorprendieron, ya lo habían hecho dos veces, pidiéndonos nuestros documentos, y les vi más ganas de golpear que estar en un buen entendimiento".
El publicista de 40 años de edad detalló que el incidente se registró a las 8:30 horas del jueves, tiempo de Egipto.
"La tercera vez que nos encontramos cerca de la estación Ramsés, eran muchos y se empezaron a juntar más y, espantados, intentamos tratar de entender lo que nos decían en su idioma, les hablé en inglés".
Cualquier negociación fue inútil con el grupo que apoya al presidente Hosni Mubarak, relató.
"Comenzaron los jalones, comenzaron a golpearnos en el cuello, a agredirnos, nos agarraron de los brazos, quise ir hacia una estación militar y un tanque que estaba como a 800 metros y hacia allá nos llevaron y nos iban golpeando; agarraron mi maleta y de mi compañero argentino, comenzaron a pedirnos dinero.
"(Fue) una especie de asalto con poder, ya cerca del tanque y aún frente a los militares me pegaron con un palo de golf en la cabeza, otro me dio otro golpe en mi perfil derecho y los militares no les hicieron nada".
Detalló que fue obligado a meterse al tanque de las milicias y, en ese momento, los agresores lo despojaron de sus cosas de valor.
"Me quitaron la cámara fotográfica, lo más importante es que estoy aquí, aún con golpes".
"Me sentí atentado en todo momento contra mi vida, nada les parecía de lo que hacíamos, llevan armas con filo, tipo machetes. Tiene una contusión cervical, para como me fue, pues estoy bien".
Un militar de más rango que hablaba inglés fue quien ayudó finalmente a estos turistas.
"Nos ayudó y entendió la situación, el argentino llevaba dos figuritas que compras en cinco libras y hasta por eso estaban molestos (...) Lo único que nos dijo fue ‘lo siento', y accedió a mandarnos en un taxi con un militar".
