Hay una gran variedad de estilos en traje sastre.
MÉXICO, DF.- El traje de dos piezas (saco y pantalón) ha sido desde siempre un aliado de las mujeres, sobre todo, de las que desean adoptar un look más profesional; sin embargo, para primavera-verano 2011, el traje sastre ha adquirido nuevas dimensiones, ya sea a través de siluetas más modernas o de tonalidades y estampados vibrantes.
La revista "Harper's Bazaar", en su edición estadounidense, publicó un editorial llamado "The New Suits" (Los Nuevos Trajes), donde afirma que los diseñadores están creando modernas interpretaciones de este clásico conjunto. La publicación se vale de ejemplos salidos de las pasarelas de Stella McCartney, Céline, Michael Kors y Valentino, cuyas propuestas se decantan por las líneas discretas y los colores neutros.
Pero la tendencia del traje sastre va más allá de un par de opciones, ya que ahora es posible encontrar una gran variedad de estilos que abarcan desde el minimalista con toques modernos, como la creación de Joseph Altuzarra, modisto seguido por fashionistas de la talla de Carine Roitfeld, de corte recto con algunos detalles asimétricos, hasta el arriesgado, como el diseño de Marc Jacobs para Louis Vuitton, cuya silueta alargada y simplista contrasta con el estampado de flores orientales, en rojo y azul. "No quise hacer nada natural. Mi intención es que todo estuviera demasiado estilizado", señaló Jacobs.
Otras firmas que han destacado por sus originales alternativas del traje de dos piezas son Fendi, Emilio Pucci y Jil Sander, quienes proponen looks superfemeninos y sofisticados.
Karl Lagerfeld, director creativo de Fendi, se centró en el uso de color y la geometría para armar la colección estival de la maison italiana. El alemán sugiere una versión juvenil y ladylike del traje sastre, en estampado gris de cuadros y ceñida a la altura de los tobillos y la cintura; además, pone de manifiesto la comodidad de la manga corta y el pantalón abombado.
La clave de este diseño está en los complementos. Lagerfeld lo combinó con gafas de sol futuristas, bolso a rayas, sandalias escarlata, cinturón ultra delgado y varias pulseras gruesas.
Por su parte, Peter Dundas, diseñador de Emilio Pucci, se decantó por un estilo bohemio y sensual. El modisto eligió la suavidad de la gamuza para añadirle textura al outfit sartorial y la intensidad del tono mostaza para hacerlo más lujoso.
Dundas remató con costuras ribeteadas y una silueta muy definida para alargar la anatomía femenina. Por supuesto, no pudo faltar el bolso de flecos para incorporar el toque western.
Finalmente, Raf Simons, líder de Jil Sander, exhibe una alternativa que juega con el maximalismo y el minimalismo. El belga se vale de las tonalidades profundas de rosa chicle y morado para contrastar la sencillez del contorno de la prenda; trazos rectos y prolijos.
