El flamante presidente de Zambia, el hasta ahora líder opositor Michael Sata, prometió hoy, durante la ceremonia de jura de cargo como nuevo gobernante del país, impulsar el sector agrícola, un mejor reparto de la riqueza natural zambiana y plantar cara a la corrupción.
Durante una breve ceremonia oficiada hoy por el presidente del Tribunal Supremo zambiano y delante de miles de seguidores, Sata, del Frente Patriótico (PF), indicó que la agricultura zambiana necesita medidas urgentes que la hagan resurgir.
Asimismo, el llamado "Rey Cobra" -por su agresividad verbal- aseguró que el nuevo Ejecutivo que presidirá pondrá en marcha una serie de políticas que permitan a Zambia, el mayor productor de cobre de África, beneficiarse de su riqueza mineral.
En referencia a la supuesta corrupción practicada por su antecesor, Rupiah Banda, el nuevo presidente dijo: "Este va a ser el Gobierno de las leyes. Veréis una diferencia en este país en los próximos 90 días".
Aunque, durante su alocución, el quinto presidente de Zambia no se refirió a China, uno de los grandes inversores en el sector del cobre del país, en el pasado Sata ha atacado a las compañías del gigante asiático por las peligrosas condiciones laborales en las que emplea a los obreros locales a cambio de un salario mísero.
No obstante, más recientemente, Sata ha rebajado el tono de sus críticas hacia los inversores chinos y ha prometido trabajar con los inversores extranjeros de cualquier país mientras respeten a los empleados zambianos.
Varias agrupaciones civiles locales celebraron la victoria de Sata y le instaron a que estableciera un diálogo más fluido que su antecesor, Rupiah Banda, con la sociedad civil.
El Ejecutivo de Banda mantuvo tensas relaciones con la mayoría de las agrupaciones civiles y eclesiásticas, e incluso llegó a amenazarlas con prohibir su operación en Zambia.
Las celebraciones no se hicieron esperar en la capital zambiana, Lusaka, donde los simpatizantes del nuevo presidente se echaron a la calle de madrugada, algunos incluso en pijama y descalzos, cuando la Comisión Electoral de Zambia (CEZ) declaró vencedor al "Rey Cobra".
Por su parte, el ya expresidente Banda, del Movimiento para la Democracia Multipartita (MMD), reconoció su derrota en las urnas y se despidió del puesto con un discurso a la nación difundido por varios medios locales en el que afirmó haberse esforzado al máximo para cumplir las expectativas del pueblo zambiano.
"El pueblo de Zambia ha hablado y todos debemos escuchar.
Aceptaremos los resultados. Somos un partido democrático y no conocemos otra vía", señaló.
La victoria del PF de Sata acaba, además, con un periodo de 20 años de mandato del MMD de Banda.
El "Rey Cobra" ya ha recibido las felicitaciones por la victoria por parte de una de las potencias del continente, Sudáfrica, informó hoy la Agencia Sudafricana de Prensa (SAPA, en inglés).
Sata y sus promesas políticas para los más desfavorecidos sumaron miles de sufragios entre los pobres y los jóvenes desempleados, descontentos con la gestión de Banda, sobre la que planeaba la sombra de la corrupción y la intolerancia.
Las elecciones zambianas estuvieron supervisadas tanto por observadores locales como por misiones de la Unión Africana (UA) y de la Unión Europea (UE).
La jefa de la delegación de Unión Europea (UE), la eurodiputada española María Muñiz, declaró el martes que, según los informes de los observadores europeos, la jornada electoral transcurrió "de manera pacífica, transparente y correcta".
El nuevo presidente zambiano, de 74 años, ha estado metido en política desde la independencia del país del Reino Unido, en 1964, y ha desempeñado varios cargos públicos con notables resultados, lo que le granjeó simpatías en varios sectores de la población, a pesar de su temperamento brusco e imprevisible.
