Juan Gómez, apoderado legal del Casino Royale aseguró que el inmueble contaba desde 2003 con los requisitos de ley para operar como sitio de apuestas.
Tras el ataque que dejó 52 muertos en Monterrey, el representante de dueños de Casino Royale, Juan Gómez, aclaró que la casa de apuestas incendiada "funcionaba con todas las disposiciones legales".
Acusó que el alcalde de Monterrey "estaba equivocado" al declarar que el casino no tenía permiso para operar. "Claro que tienen permiso para funcionar como casino", aclaró en conferencia de prensa.
"El edificio que conocieron tiene derecho de uso de suelo", sostuvo. "Desde el 2003 estaba autorizado por Protección Civil".
De igual forma, mencionó que no es momento para entrar en discusiones, por lo que expresó sus condolencias a las víctimas y la solidaridad con los deudos y familiares de los trabajadores que fallecieron en los hechos.