Padrinos políticos
Radiografía Política / Hugo "el Terrible" Rosales Badillo Si hubiera una fotografía que definiera la palabra cinismo en el diccionario, seguramente saldría la imagen de Luis Arnulfo Rosales de la Hoya, nuevo secretario general de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Hace un par de meses declaró a un medio impreso que no hay congruencia entre lo que el Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE) dice y lo que hace en materia educativa, ya que Elba Esther Gordillo tiene más la intención de sostener los privilegios para sus dirigentes que acercar la educación a la gente.
Además como contexto habría que puntualizar qué es la CNTE, según sus propios documentos: "La CNTE es una organización de masas conformada por los trabajadores de la educación democráticos del país, independientemente de la burguesía y su estado, del charrismo sindical y de cualquier organismo político, es decir, no es propiedad de nadie más que de los propios trabajadores de la educación". Así lo dice su página de internet http://cntrabajadoresdelaeducacion.blogspot.com.
Pues bien, el citado "profesor" Rosales de la Hoya perdió el mínimo de credibilidad que tenía y carece ya de toda legitimidad cuando los estatutos con los que se rige la CNTE impiden que alguien que ya fue Secretario vuelva a serlo; hace un par de días se hizo una excepción y se designó a Luis Arnulfo Rosales de la Hoya como nuevo dirigente. Violando los propios estatutos que se crearon con la intención de ser democráticos, a diferencia de los del SNTE, según los fundadores de este movimiento sindical de afiliación izquierdista.
El colmo del cinismo fue su declaración luego de ser ungido como secretario general: "Esta fue una consulta a la base como única vez. Órganos de Gobierno de la CNTE permitieron que se hiciera un Consejo de Transición donde alguien que ya fue secretario como su servidor estuviera, pero los estatutos son claros: quienes ya fuimos secretarios no podemos volver a serlo. Aquí fue un trabajo de mucho cabildeo y consenso...". La justificación legaloide de un acto antidemocrático. Qué corta memoria de Rosales de la Hoya, un liderazgo sindical más, que se convirtió en lo que una vez combatía.
El Secretario de Gobierno en Durango, sin lugar a dudas, no es flor de un día; sonantes son las informaciones que se filtran de su boca, y se convierten en dagas que calan hondo en el poder público.
No hace mucho tiempo Hugo Rosales Badillo declaró a la cadena internacional BBC Mundo, que los hechos ocurridos en Tierras Coloradas, comunidad indígena de Mezquital, tuvieron su origen en una disputa entre grupos del crimen organizado, pues la comunidad se dedicaba a la siembra de enervantes para un cartel en específico, y el otro bando, en venganza, pues arrasó con decenas de viviendas. Esta versión fue revelada por el Secretario de Gobierno, con toda su crudeza. El punto en específico jamás se abordó de nueva cuenta. Pocos días después, Rosales Badillo mencionó a medios locales que había información en el sentido de que un grupo bien identificado del crimen organizado se replegó de la zona de colindancia entre Durango y Zacatecas; la declaración para algunos fue simplemente desafortunada; para otros, un acto de provocación. En las últimas dos semanas, la psicosis es un fenómeno presente en varios municipios de la región de los Llanos, que se paralizan cada vez que corre el rumor de que un convoy de criminales se acerca. Guadalupe Victoria lo vivió: la cabecera municipal quedó prácticamente desierta ante la posibilidad de que un comando hiciera acto de presencia. Lo mismo en Villa Unión, Poanas, donde no pueden borrar de sus mentes la imagen de la cabeza cercenada de su comandante de Policía, abandonada en la plaza principal. Igual en Cuencamé y en Francisco I. Madero. Apenas ayer, de nueva cuenta el Secretario General consideró pertinente emitir un llamado de alerta y advertir a la población que evite viajar de noche, y que lo mejor es trasladarse en autobuses de la capital del estado a municipios del interior. Además, identificó como zonas de riesgo el corredor de Cuencamé a Vicente Guerrero, en sí, la región de los Llanos.
Las declaraciones mediáticas de Hugo Rosales Badillo son un peligro no por su contenido, sino porque parecen no responder a ninguna estrategia ni política ni de seguridad, y porque meten ruido en un gobierno que avanza para asentarse.
CIUDADANÍA COINCIDE CON GINA
Sabedora de los temas del transporte, Gina Campuzano lamentó el que no hubiera sido parte del Consejo Consultivo del Transporte, órgano que toma las decisiones sobre los aumentos de tarifas del transporte urbano.
Dice que se tenía claro que el aumento se iba a presentar ya que ha subido el precio de la gasolina; en fin, dijo que todo ha aumentado. Lo que sí es importante mencionar es que también varios de los ciudadanos comunes y corrientes coinciden con ella porque también a ellos les hubiera gustado estar dentro del Consejo Consultivo de negociaciones del Gobierno Federal en donde se habla de los productos que se van a aumentar, como la gasolina.
Gina no sale de un error cuando ya está en otro, porque el exigir con mano en cintura la participación dentro de esos órganos consultivos de transporte es como pedirle a su jefe Felipe Calderón que tome en cuenta a los mexicanos antes ordenar un aumento a los energéticos, a la canasta básica o simplemente a las medicinas.