Indagan. Peritos internacionales y nacionales de aeronáutica civil laboran en el lugar donde se estrelló el helicóptero de Blake.
Peritos internacionales laboran en el lugar donde el pasado viernes se estrelló el helicóptero que transportaba al secretario de Gobernación, Francisco Blake, y siete personas más, las cuales perdieron la vida.
El área de 150 metro, donde se encuentran esparcidos los restos del europter Super Puma, están delimitados con una cinta amarilla, además de que miembros del Ejército realizan un cinturón de seguridad. De la aeronave sólo se aprecia una parte de la cabina con dos ventanas y la franja tricolor característica de los helicópteros de Presidencia, lo demás son restos fragmentados de metal, asientos y cinturones de la aeronave.
Los peritos registran cada una de las partes, toman medidas, caminan por el área y señalizan las trayectorias posibles. Al lugar se pudo acceder en un helicóptero de la Policía Federal, luego que la Secretaría de Comunicaciones y Transportaciones autorizara los recorridos para la prensa.
PILOTO NO PREVEÍA ATERRIZAJE : LÓPEZ MEYER El piloto del helicóptero no tenía intención de aterrizar la aeronave en el lugar del siniestro, toda vez que las primeras investigaciones de campo evidencian que no bajó el tren de aterrizaje.
El director general de Aeropuertos y Servicios Auxiliares, Gilberto López Meyer, dijo que la aeronave llevaba las ojivas del rotor abiertas, lo que indica que iba a velocidad de crucero, es decir, a la potencia normal de vuelo.