José R. Mijares, presidente municipal de Saltillo, Coahuila, en 1918 y 1919 y Antonio D. Cabello.
Los siguientes datos y textos, los tomo del libro “Saltillo, Gobierno Municipal”, de la autoría del escritor y periodista don Roberto Orozco Melo, relacionados con los presidentes municipales de Saltillo, Coahuila.
“1917. Participaron en el Gobierno Municipal, los siguientes: “Abel Barragán, Gustavo Figueroa, Francisco T. Rodríguez y Juan Aguirre, don Abel Barragán quien se había desempeñado durante la Revolución, como pagador de las partidas militares y como subtesorero interino de la Nación, volvió a ser alcalde sustituto hasta el 31 de diciembre de 1917. El 18 de abril de 1917, al aceptar la candidatura del Partido Liberal Constitucionalista de Coahuila para diputado local, don Abel solicitó licencia de la alcaldía; el síndico Gustavo Figueroa cubriría el puesto hasta el mes de julio, y lo sustituyó Francisco T. Rodríguez, en su carácter de síndico en el Ayuntamiento... se nombró como presidente municipal interino al regidor Juan J. Aguirre...”.
“1918 y 1919. El profesor José R. Mijares, llegó a la presidencia municipal en el 1o. de enero de 1918, posesión que ocupó hasta el seis de agosto de 1919. Don José R. Mijares enfrentó dos eventos adversos en Saltillo: el incendio del Teatro García Carrillo y la pandemia de influenza española que cobró un número altísimo de vidas, obligando al pueblo a aislarse. A través de los años el incendio del teatro ha sido un misterio, ya que sucedió justo la noche en que se presentaría la obra “El Loco Dios”. “El caso es que el incendio y quien haya sido culpable, la cólera divina, el fanatismo terrenal, o un descuidado fumador dejó una vez más a la sociedad de Saltillo sin aquel templo de las artes”.
“El combate a la influenza española, se clausuraron centros de reunión, y se canceló tanto la feria de Saltillo como las corridas de toros y las peleas de gallos; todas las oficinas públicas suspendieron labores. Ya en noviembre había pasado lo peor, mas la recuperación tardaría. El balance de los daños al fin del periodo arrojó escuelas clausutradas, erario herido de muerte y negocio cerrados”.
“Por la precaria situación económica del Ayuntamiento, el alcalde convenció a hacendados y pequeños propietarios rurales hacerse cargo del salario de los maestros que impartían la enseñanza primaria en el campo, sólo por un tiempo, mientras volvían a agarrar agua las nubes”.
“El día primero de mayo de 1918, Saltillo fue cede del Congreso Fundador de la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM), que aglutinó a sindicatos y a organizaciones obreras de casi todo el país. Las sesiones se efectuaban en el Teatro Obrero y fueron auspiciadas por el gobernador Gustavo Espinosa Mireles. Así empezó a perfilarse en Coahuila un socialismo que nunca arraigó”.
“El señor José Ma. Hernández obtuvo la concesión para prestar el servicio de lanchas en el Lago República de la Alameda Zaragoza... En esa época se instalaron en Saltillo una fábrica de pastas alimenticias, otras de cigarros llamada La Esperanza y la más destacada de esa época: la Compañía Exportadora de Caucho Mexicano, que por varios años fue importante fuente de empleos en la población”.