Se saludan. En la imagen, la primera dama, Margarita Zavala; el secretario de Educación, Alonso Lujambio y el científico Mario Molina.
Alonso Lujambio aseguró que le "indignan los malos, pero más los buenos que no hacen nada" para promover y transmitir los valores y conductas para formar una ciudadanía del Siglo XXI y enfrentar a quienes optan por sumarse a actividades ilegales.
Al dictar la conferencia "Educación Cívico-Ética hacia la formación de mexicanos del Siglo XXI" en la apertura del foro para celebrar los 90 años de la fundación de la Secretaría de Educación Pública (SEP), el funcionario dijo que México tiene una débil estructura de valores que impiden construir una ciudadanía y democracia acorde a este momento.
En el Auditorio Nacional, frente a los directores generales de la secretaría, maestros y estudiantes, Lujambio Irazábal dio a conocer que un estudio realizado en el año 2009, entre 37 países de América Latina reveló que sólo 10% de los estudiantes de segundo de secundaria demostraron que comprenden los conceptos cívicos y de ciudadanía, mientras que 27% desconoce y no identifican la diferencia entre justicia e injusticia. Dijo que es momento de poner "de moda" la formación de valores. Los valores que sí valen".
Luego de hacer un llamado para iniciar una cruzada por los valores cívicos y éticos, el titular de la SEP condenó a quienes se ligan a actividades ilegales; enfatizó que esa es una opción moral, pero que millones de mexicanos, a pesar de la condición social en la que se encuentras, "no están optando por sumarse a ese tipo de actividades. Quien toma eso lo opta con libertad".
Señaló que el Estado tiene la responsabilidad de darles oportunidades a quienes así lo han hecho; sin embargo dijo que se debe promover un esquema de valores en el que los jóvenes rechacen ese tipo de alternativas.
"No queremos que los ciudadanos claudiquen frente a la corrupción", dijo el titular de la SEP.
El encuentro fue inaugurado por Margarita Zavala, esposa del presidente Felipe Calderón, quien destacó la labor de José Vasconcelos, al señalarlo como el "artífice de la educación pública".
