Medio Ambiente. Pedirán al Estado más recursos para combatir la plaga en árboles.
La Secretaría de Medio Ambiente pedirá más de 600 millones de pesos al Gobierno del Estado para combatir al gusano descortezador que ha puesto en peligro a la Sierra de Arteaga, Saltillo y Múzquiz.
Los bosques coahuilenses han sido afectados por heladas, incendios y sequías que se registraron durante el 2011, sin embargo el nuevo enemigo de los bosques es la plaga del gusano descortezador.
La titular de la Secretaría de Medio Ambiente, Eglantina Canales, reconoció que aún no hay un techo presupuestal, pero indicó que durante este año se destinaron 600 millones de pesos, que fueron insuficientes para combatir las plagas, por lo que pedirá se incremente el presupuesto.
"La falta de precipitación en el Estado hace que las defensas de los árboles disminuyan y sean presa fácil para las plagas", manifestó Eglantina Canales.
Asimismo, comentó que trabaja en acciones específicas que se aplicarán a partir del mes de enero, entre los que se encuentra el tratamiento para los árboles que fueron dañados por la intensa sequía.
Para disminuir las plagas la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), aplicará programas enfocados a erradicar las plagas de heno motita, muérdago y gusano descortezador en las zonas boscosas del Estado.
Se desconoce el número exacto de hectáreas y municipios afectados, pero se estima que son alrededor de 19 municipios y 30 mil árboles dañados los que han sido dañados por las plagas.
"Los árboles están debilitados y son atacados por estos organismos y no tienen la capacidad de recuperarse por sí mismos, además muchos árboles del bosque han sido atacados numerosas veces y miles de ellos han sido talados", puntualizó la bióloga.
Ante el inminente peligro que representan las plagas, la Secretaría de Medio Ambiente y la CONAFOR tendrán como uno de sus principales retos para el 2012, aminorar los estragos que han causado los gusanos descortezadores y proteger las zonas boscosas para prevenir futuras emergencias ecológicas.
"Las plagas son elementos recurrentes en el bosque, es normal, pero si los árboles están en buenas condiciones no les pasa nada, sobreviven perfectamente, pero si no más árboles seguirán muriendo", finalizó Eglantina Canales.
