Camino. Ely (a la izquierda), en compañía de otros hondureños, busca llegar a los Estados Unidos.
Ely Castillo Zavala lleva 45 días recorriendo México. Ya trae los tenis un poco rotos y los pies cansados pero nada lo hará detenerse en su camino hasta llegar a los Estados Unidos.
En Honduras dejó a sus padres y ocho hermanos, un jacal y mucha pobreza. A sus 17 años apenas sabe leer y escribir. Llegó hasta tercero de primaria porque cuando se es pobre, dice, "primero hay que trabajar antes que estudiar".
TEMOR
Aún recuerda las palabras de su madre cuando le dijo "mi'jo no te vayas porque el camino es muy duro, además que no ves que en México los matan", pero Ely pensó que todo eran habladurías. "Ahora sí tengo miedo pero cada vez estoy más cerca y no me voy a regresar".
Ely le da gracias a Dios porque sólo ha pasado hambre en su camino hacia Estados Unidos, "había escuchado lo que le pasa a los migrantes en México pero pensé que eran bromas. Hasta ahora no me ha tocado nada y ojalá todo siga así".
POCO TRABAJO
Quiere llegar a los Estados Unidos porque en Honduras el trabajo es escaso, mal pagado, y hay mucha pobreza.
"Trabajaba con el machete y el azadón. Nosotros somos pobres y vengo para darle mejor vida a mis padres y a mis hermanos, y primero Dios voy a llegar y los voy a ayudar".
Salió de Honduras con mil pesos y ya no trae nada en los bolsillos porque en el trayecto unos policías los amenazaron con hablarle a Migración si no les daban dinero.
"Nos quitaron todo. Sí me arrepiento de haber dejado mi casa porque el camino es muy duro pero no me voy a regresar, sólo le pido a Dios que me deje llegar bien".
En su camino a los Estados Unidos, Ely va acompañado de los hondureños Cristián del Cid, de 19 años de edad, y Antonio Salvador, de 24 años de edad.
"La vida en Honduras es muy cara y los sueldos mal pagados, no nos quedan ni 100 pesos para los refrescos".
Los tres llegaron a la Casa del Migrante de Torreón a descansar y probar alimentos para seguir su camino a los Estados Unidos.
"Sabemos que el sueño americano se puede convertir en nuestra peor pesadilla, pero lo vamos a intentar".
El siglo de torreón / Cristal Barrientos
El siglo de torreón / Cristal Barrientos
Inauguran Casa del Migrante
Ahora los migrantes podrán hacer un alto en el camino y descansar en Torreón, mientras llegan a los Estados Unidos.
Ayer martes, la Dimensión Diocesana de Pastoral de la Movilidad Humana y Migrantes inauguró la Casa del Migrante en donde se les ofrecerá comida, atención médica, y un lugar para descansar y bañarse. De acuerdo a la Dimensión Diocesana en 2010 se dio ayuda a dos mil 496 indocumentados. Quienes deseen más información pueden solicitarla en las oficinas de la Vicaría de Pastoral, en los teléfonos 793-81-31 y 713-53-44. También puede llevar sus donativos a la parroquia Santa Cecilia ubicada en la colonia Las Julietas o en la Vicaría de Pastoral en calle Niños Héroes número 390 norte en Torreón.