Oficiales militares norcoreanos abandonaron el miércoles abruptamente una reunión con sus homólogos de Corea del Sur en la Zona Desmilitarizada, informaron autoridades surcoreanas, lo que ensombrece las esperanzas de que se alivien las tensiones en la península.
El fracaso de la reunión se debió a la falta de acuerdo sobre el temario de las próximas conversaciones, cuando había esperanzas de que fueran las primeras de alto nivel en materia de defensa en muchos años.
Seúl sostuvo que el centro del temario debía ser los dos ataques que sufrió el año pasado, en tanto los norcoreanos querían incluir otros asuntos militares, dijo el ministerio de Defensa surcoreano en un comunicado.
Corea del Sur culpa a Pyongyang del hundimiento de uno de sus buques de guerra en marzo, en el cual murieron 46 marinos, pero Corea del Norte niega estar involucrada. En noviembre, Corea del Norte atacó con artillería una isla surcoreana. Cuatro personas murieron.
En medio del intercambio de opiniones, los oficiales norcoreanos abandonaron bruscamente la reunión y no se fijó fecha para otra, dijo un vocero de la Defensa surcoreana que habló bajo la condición reglamentaria de anonimato.
La falta de acuerdo sobre un temario revela el grado de empantanamiento de las relaciones desde que el presidente surcoreano Li Myung-bak endureció su posición frente a Pyongyang.
Los esfuerzos para avanzar en una serie de asuntos, como el programa nuclear del Norte, una serie de proyectos industriales conjuntos y turismo, suelen verse frustrados antes de comenzar.
Si bien no se fijó fecha para regresar a la mesa de conversaciones, las dos partes sí se pusieron de acuerdo para discutir la reanudación de reuniones de familias separadas por la guerra de 1950-53. Las futuras conversaciones sobre este tema podrían ampliarse para abarcar otros.
