El detective del sur de El Bronx, Jason Arbeeny, un veterano de 14 años de servicio de el Departamento de Policía de Nueva York, fue encontrado culpable de 'plantar' drogas a una mujer y su novio en 2007, según fuentes oficiales.
El juez Gustin Reichbach encontró a Arbeeny culpable de ocho cargos de falsificación de documentos y de mala conducta de un oficial por plantar droga a personas inocentes, con el fin de incrementar los logros de las autoridades contra el narcotráfico.
Antes de anunciar el veredicto el martes, el juez regañó a los miembros del departamento de Policía por lo que describió como una extendida cultura de corrupción endémica en la unidad antidroga, de acuerdo con documentos de la Fiscalía.
El caso contra el detective tenía sus raíces en un largo historial de corrupción en las unidades antidroga del Departamento de Policía.
Varios agentes antinarcóticos de Brooklyn han sido capturados por mal manejo de la droga decomisada y cientos de casos de drogas 'turbios' han sido desestimados.
La ciudad ha tenido que pagar la liquidación de demandas civiles interpuestas al departamento de Policía por encarcelamientos erróneos.
Según los documentos, el 25 de enero de 2007, Arbeeny plantó una pequeña bolsa de cocaína en dos personas inocentes.
El abogado del detective, Michael Elbaz, trató de desacreditar a los principales testigos del caso a favor de los acusados, Yvelisse DeLeón, y su novio, Juan Figueroa.
De León declaró que la pareja había llegado en un vehículo al edificio de apartamentos en Coney Island, donde residían y fueron abordados por dos agentes de policía vestidos de civil.
La mujer testificó que vio a Arbeeny sacar una bolsa con polvo blanco de su bolsillo y luego la colocó en el vehículo en que ella viajaba con Figueroa.
También en 2007, el detective fue acusado de robar varias bolsas de cocaína de la camioneta usada para transportar prisioneros que se le había asignado, sin embargo el juez lo encontró no culpable de estas acusaciones.
Arbeeny enfrenta una condena de hasta cuatro años en prisión. La sentencia quedó programada para el mes de enero.