El autor de Vidas Paralelas, cuenta: Publio Clodio era un joven, patricio de linaje, señalado en riqueza y en elocuencia, pero que en insolencia y desvergüenza no cedía el primer lugar a ninguno de los más notados de disolutos. Amaba éste a Pompeya, mujer de César, sin que ella lo llevase a mal. En ese tiempo se celebraban muchas ceremonias con una solemnidad arcana, una de ellas daba lugar a la veneración de una diosa en cuyo honor se celebra una fiesta. A esta fiesta no era lícito se acercara ningún varón, por lo que Clodio que aún era imberbe, se disfrazó de mujer. Mientras no habló nadie se dio cuenta de que era hombre. Una vez que quedó en claro su atrevimiento, al hablar se supo que era varón por lo que fue echado del lugar. Al día siguiente todos estaban enterados de los pormenores del caso. César repudió a Pompeya, pero llamado a ser testigo dijo que nada sabía de lo que se imputaba a Clodio. Sorprendido el acusador, de tan extraña declaración, le dijo en tono de reproche: siendo así ¿por qué había repudiado a su mujer? Éste contestó con su célebre frase "Por que quiero que, de mi mujer, ni siquiera se tenga sospecha". A esta locución se le ha venido dando un texto diferente con un sentido similar que no varía en lo esencial, por ejemplo, que la mujer del César no sólo debe ser honrada sino que también, debe parecerlo.
En el pasado, jueves 21 de mayo de 2009 leí una nota en un periódico nacional, a propósito de la refriega en que se han liado, el expresidente Vicente Fox Quesada y el presidente del Instituto Federal Electoral, Leonardo Valdés Zurita, en la que se dice, remedando a Julio César, que el IFE no sólo tiene que ser impoluto, sino también parecerlo. En atención a que ese organismo solicita a la Cámara de Diputados que del presupuesto de 2012 se le destine 16 mil millones de pesos, cantidad que a primera vista parece desmesurada y a la segunda también. Es obvio que aquí y en la república de China la cantidad es un titipuchal de billetes. Pero Fox pasó por alto que se sabe que Leonardo Valdés Zurita recibió un favor del entonces gobernador del Estado de México según publicó El Universal, refiriéndose al video llevado al portal You Tube que puso al descubierto el préstamo de un vehículo aéreo para el traslado del presidente consejero del IFE de Ixtapan de la Sal a sus oficinas en Viaducto. Lo que no tendría ningún significado negativo sino fuera porque... bueno, bueno, lo de deber favores y aceptar que un helicóptero lo mueva no es trascendente si él no ocupara la presidencia del IFE y quien magnánimamente le cedió la nave no aspirara a figurar como candidato a "la grande".
Lo del agarrón de expresidente se ubica en otro contexto. No hay ninguna ley en un país donde se practica la democracia que impida a un ciudadano emitir sus opiniones, si se quiere a todo pulmón, en asuntos del orden político. El habitante de San Cristóbal dijo que le parece criminal que se pretenda seguir imponiendo bozales a los aspirantes a cargos de elección popular. Acotando que así están destruyendo nuestra vida democrática. Luego tallándose los ojos con el dorso de sus manos y con los dedos las sienes, concluyera triunfalmente su catilinaria diciendo que el IFE está, para lo cual se puso de pie, acabando con la libertad que es la esencia de la democracia, (se oyeron nutridos aplausos). Pero no paró ahí, ya encarrilado, destacó que el proceso electoral es una gran oportunidad para que salgan las ideas, (siempre que las haya, digo yo). Luego le exige al IFE que no estorbe, pidiendo a los candidatos que hablen con la cabeza, que propongan "ya no repetir lo mismo que venimos haciendo". Ideas nuevas como legalizar las drogas, sacar al Ejército de las calles e impulsar oportunidades. Todos ahorita le echan al rollo, al discurso y a la promesa. Dijo que un debate a fondo ayudará a ganar la batalla contra el crimen, a reconstruir la economía y a radicalizar, uff, la revolución educativa.
Luego vino el revire, en voz del árbitro electoral Leonardo Valdés, quien apuntó: "Creo yo que quien era ser presidente en 2006 debe hacerse cargo de que la reforma fue producto de hechos de los que él fue un actor sobresaliente". Y ¿eso qué?, eso fue ayer, estamos en el ahora y Fox hace un buen rato es un ciudadano más. ¿Qué incidió de manera no adecuada en los procesos electorales? Como puede ser que sí, puede que no. Que se haya portado mal en la elección de 2006, eso está por verse. Hasta ahora no he visto ni oído de un procedimiento legal en su contra, de cuya sentencia pudiera derivarse una conducta indebida. Que haya habido o no un mal comportamiento impropio del aquel entonces presidente, no hay constancia legal de que así haya sido. Los consejeros electorales se están metiendo en camisa de once varas, que es una expresión coloquial señalando la poca conveniencia de complicarse la vida innecesariamente. Estoy seguro de que esta vez tiene razón Vicente Fox. Es obvio que si metió la pata eso fue como presidente, y hoy es un ciudadano que le gusta opinar y nadie puede coartar su derecho a hacerlo. En fin, podía decirse que en este asunto hay polvo de aquellos lodos.
