El mexicano Saúl Álvarez y el puertorriqueño Kermit Cintrón prometieron una espectacular pelea por el título superwelter del Consejo Mundial de Boxeo.
El compromiso por llenar la Plaza de Toros México va en serio. Saúl "Canelo" Álvarez asume el reto de llenar el coso de Insurgentes al lanzar la promoción de dos boletos por uno para los compradores de estos últimos días, en donde será el propio pugilista el que desembolse de su dinero el pago de esa segunda entrada de regalo del combate que sostendrá el sábado en la noche ante el boricua Kermit Cintrón.
"Desde un principio les dije a los organizadores que estaban muy caros los precios del combate. Así que sugerí que a partir de hoy todos los boletos se venderán al dos por uno, pues yo voy a pagar ese pase de regalo. Tu compras una entrada y de mi parte va la otra", promociona el tapatío.
Álvarez realizará su tercera defensa como campeón mundial superwelter del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) en un escenario que pisa por primera vez. Un aforo que personalidades como el presidente del CMB lo consideran como la "catedral de las leyendas del boxeo mexicano".
Pese a sus apenas 21 años, Álvarez toma el reto de presentarse en un aforo que tiene una capacidad de 41 mil personas, con la adversidad de que la Ciudad de México ofrece, cada fin de semana, infinidad de eventos de entretenimiento. Además, ese mismo día juega el Cruz Azul ante Morelia, en pleno juego de Liguilla del torneo local.
Pero "Canelo" tiene la certeza de que sus aficionados les responderán. Aunado a que piensa que su disciplina es de las grandes masas.
"El boxeo es de gente que venimos desde abajo. Este deporte lo ven gente humilde, así que esta distracción les pertenece. Por eso estoy pagando esa segunda entrada para que más personas puedan venir a verme", dijo.
Sobre su rival en turno, dista mucho de sus anteriores dos defensas. Ahora no se encontrará a un rival veterano como Ryan Rhodes, ni tampoco a un peleador que debió de subir varias libras como su connacional Alfonso Gómez. Cintrón es un pugilista que le ha dicho sí a los grandes retos.
"Cintrón es un gran peleador, enfrentó a los mejores del mundo. Es un boxeador completo, pero estamos listos para esto y para más, no quiero fallarle a la gente", afirma el tapatío.
Antes de retirarse a descansar a la suite de su hotel, el "Canelo" Alvarez finalizó "quiero cerrar un gran año, el mejor de mi trayectoria. Para el 2012 se esperan grandes cosas, pero debo ganar primero a Cintrón este sábado".
El "Canelo" Alvarez, quien destacó que no tiene problemas en la báscula para el pesaje programado este viernes en la Plaza México, abordó una lujosa camioneta y se retiró con su manager José Reynoso, el entrenador Edison Reynoso y su hermano Víctor.
El boricua es directo de sus intenciones: noquear y salir como campeón mundial. "Yo no vine aquí a hablar. Vengo a noquear en el ring y a arrebatarles ese cinturón. Espero que los jueces no me roben la pelea si llegamos a la decisión", advierte Kermit.
