Prepara tu boda sin volverte loca

Porque en gran parte el éxito de una luna de miel, depende del resultado de la boda, Consuelo Míreles, quien desde hace años se dedica al negocio de organizar y planear bodas, recomienda no perder la cabeza preparando la fiesta, pero si ocuparse a tiempo de que hasta el más mínimo detalle salga bien, no por nada es considerado por muchas mujeres el día más importante de su vida.

Consuelo explica que actualmente es mayor el número de parejas que dejan en manos de una empresa organizadora, su fiesta de bodas, ya que este servicio que antes se consideraba un lujo, ahora esta al alcance de todos los bolsillos, y las personas que lo solicitan lo hacen de acuerdo a un presupuesto que puede incluir una sola parte de la celebración o todo el festejo.

Para no perder la cabeza antes de la boda, es recomendable primero realizar una lista que describa cuál es la celebración que la pareja pretende y de ahí especificar cada uno de los detalles que hagan posible que esta resulte bien. Por ejemplo saber si se quiere una recepción al aire libre, o en un espacio cerrado, el número de invitados y el tipo de fiesta que se ofrecerá.

De acuerdo a esto, los detalles del salón, buffet, bebidas, decoración, música, cubiertos y demás, van apareciendo, lo que facilitará la planeación de la fiesta. Es recomendable cotizar por paquetes, por ejemplo los salones hoy día incluyen las mesas, sillas, manteles y vajilla a usar, como mínimo, aunque otros incluyen equipo de música, luces y meseros, lo que permite que la pareja que celebrará su boda, tenga una razón menos para perder la cabeza.

“Yo siempre recomiendo que una boda se planee por lo menos con una año de anticipación, porque este detalle le da la facilidad a la pareja de negociar un precio mejor de salón, músicos y comida, por ejemplo, he conocido parejas que empiezan a pagar en mensualidades el servicio que van a utilizar a fin de año, así no es pesada la inversión”, comentó la gerente de servicios de boda.

Pero para no perder la cabeza planeando la boda, detalles como el vestido de la novia, el frac del novio, las flores del salón y las bebidas, entre otros, tampoco se pueden descuidar, por lo que la experta recomienda recurrir a familiares o amigos que puedan sumarse a la planeación y organización de la boda, cuando no se cuenta con un tercero encargado de la organización, a quienes se les pueden encargar por lo menos las cosas orgánicas que se llevan a la iglesia o salón a última hora, como las flores, por ejemplo.

Uno de los detalles que ayudan a no perder la cabeza, por cuestiones económicas, es contar con un presupuesto definido para la celebración, porque de esta manera se logra determinar las características del lugar del festejo, la música, bebidas, comida y detalles para regalar. Situaciones de las que se puede ocupar una pareja que no contrate un servicio especializado en servicios de celebración de bodas.

“Para que verdaderamente una pareja disfrute el día de su boda, van a necesitar de mucha ayuda. Con toda la gente que tendrán que saludar, del baile y la gran cantidad de fotografías que les tomarán, no les quedará mucho tiempo para comer y beber. Así que será buena idea darle esa tarea a los familiares y amigos, para que atiendan esos menesteres y no perder la cabeza”, concluyó Consuelo Mireles, quien ha planeado el tan esperado día de decenas de parejas laguneras.