Inconscientes. Personas acostumbran arrojar sus desechos a un costado de la carretera, sin medir el daño.
Algunos predios ubicados en los primeros kilómetros de la carretera Durango-Fresnillo se convirtieron en tiraderos de escombro y basura, lo que frena los intentos de las autoridades por mejorar la imagen urbana en esa zona de la ciudad.
A pie de la rúa, se observan montones de diferentes desechos, en su mayoría dejados de manera irregular. En algunos casos, incluso, resaltan las advertencias institucionales que llaman a abstenerse de prácticas de ese tipo; a un costado de ellas, también hay escombro y basura.
El problema, que data de hace algunos años, no ha logrado ser abatido.