EFE
Un elefante domesticado baja de un remolque antes de participar en una procesión budista en el templo de Rajamaha Viharaya en Kelaniya, en el extrarradio de Colombo, Sri Lanka. En toda procesión budista que se precie, deben participar elefantes. Un reciente censo llevado a cabo por el Ministerio ceilanés de Vida Salvaje ha determinado que en la isla viven 5,879 elefantes salvajes, 122 elefantes amaestrados y 1,107 crías de elefante.