Oficio. Tito,Meme y Natalia Lafourcade ahora se dedican a producir.
Es un trabajo que no garantiza un cheque mensual. "Y mucho menos un bono al final de año", cuenta Benny Ibarra. Se trata del oficio de productor musical.
"Es muy cíclico, hay veces que tienes la oportunidad de ganar dinero y hay otras en las que tienes que invertir todo en ello. Hay momentos en los que tienes dinero y andas de gira, pero otros en los que no generas nada porque estás componiendo", señala Benny, quien estuvo involucrado en proyectos de Aleks Syntek, Onda Vaselina, Celso Piña y Armando Manzanero.
No obstante, cada vez más cantantes deciden alejarse el micrófono, bajar de los escenarios y, en su lugar, encabezar un proyecto desde las consolas.
La razón, evidentemente, no es la ganancia económica sino el afán de tener un mayor aprendizaje musical, la promoción proyectos alternativos e independientes y, ganar prestigio.
"La producción es tu traducción de lo que es un artista, es como si hicieras una radiografía al artista desde tu punto de vista musical, das tu interpretación de lo que te gustaría que fuera ese cantante", comenta Óscar Schwebel, integrante de OV7, quien ha producido a Kalimba y también ha colaborado con Alejandra Guzmán.
Benny Ibarra explica que muchas veces es difícil empatar la producción con las ganancias:
"No hay cheques con dinero cada mes, no hay fórmulas ni bono al final del año. Se necesita ser inteligente y rodearte de gente que sea afín contigo".
EXPLOTAN LADO CREATIVO
Algunos intérpretes se toman descansos para experimentar su lado creativo como productores. Tal es el caso de los integrantes de Café Tacvba que se ha dedicado en su retiro temporal para desarrollar esta faceta.
"Es una alternativa; al trabajar de productor nadie te ve, puede ser un trabajo del que muchas veces la gente no se da cuenta". refiere Enrique Rangel, quien está debutando como productor con la banda Banderville.
Agrega: "Hay muchos productores buenísimos que sólo son reconocidos por otros músicos u otros productores; en este trabajo, la fama es una cosa diferente a subirte al escenario, no existe el aplauso directo hacia tu trabajo, sino que más bien andas entre las sombras". El músico, que ha conocido el éxito masivo con Café Tacvba, reflexiona: "Hay gente que lo que le gusta de ser músico es subirse a tocar, pero un productor no toca nunca. Sólo está como dirigiendo a todos los demás".
