Reanudan juicio. Un mujer sostiene un retrato del expresidente egipcio Hosni Mubarak, frente a la Academia de la Policía en El Cairo.
El juicio contra el expresidente egipcio Hosni Mubarak reinició en El Cairo, en medio de nuevos desórdenes a la entrada de la sede judicial, donde cuatro funcionarios policiales rinden testimonio.
La sesión transcurre de nueva cuenta en medio de gran expectación, pero en esta ocasión por orden del juez Ahmen Refaat, la audiencia de ayer fue sin cobertura televisiva como venía sucediendo, reportó la cadena Al Yazira.
En la entrada del salón judicial se han dado cita tanto seguidores como opositores de Mubarak, aunque de acuerdo a los reportes de prensa, la Policía antimotines ha acaparado el descontento de ambos bandos.
Gamal Eid, uno de los abogados de la parte acusadora, explicó que el testimonio de los cuatro funcionarios policiales es importante para probar la culpabilidad del exmandatario en la represión de las protestas de inicio de año que dejaron 850 muertos.
Los cuatro oficiales se encontraban en el cuarto de operaciones de la Policía de donde partieron las órdenes de reprimir a los manifestantes, en cuya expedición donde se busca probar la participación de Mubarak.
La defensa del exmandatario egipcio está a cargo de un equipo de 10 abogados enviados por el gobierno de Kuwait, como un gesto para agradecerle su apoyo en la Guerra del Golfo en 1991.
Tras dos sesiones de formalismos, los protagonistas del juicio contra el expresidente egipcio Hosni Mubarak se sumergieron ayer en lo que promete ser un largo y complejo proceso con la declaración de los primeros testigos, que no aclararon si el "rais" ordenó disparar a los manifestantes.
Acostado una vez más en un camilla, Mubarak compareció en la sala de la Academia de Policía en El Cairo habilitada para este juicio, que por primera vez no fue televisado en directo por orden del presidente del tribunal, Ahmed Refaat.
Efe