Avanzan los rebeldes. Rebeldes libios de Misrata celebran durante la toma de Trípoli (Libia).
Los insurgentes libios se atribuyeron la victoria ayer en un suburbio cercano al aeropuerto de Trípoli tras un enfrentamiento nocturno, al tiempo que la oposición trataba de completar su control de la capital a la vez que combatía a los leales al líder Muammar Gaddafi en otras partes del país.
Los residentes de Qasr bin Ghashir, a unos 30 kilómetros al sur de la capital, celebraron su victoria disparando al aire y aporreando retratos de Gaddafi con sus zapatos. Las fuerzas del régimen habían estado cañoneando el aeropuerto desde allí.M "Se puede decir que bin Ghashir ha sido liberado de los soldados de Gaddafi", afirmó Omar al-Ghuzayl, un comandante rebelde de 45 años ahora a cargo de las fuerzas en el aeropuerto de la capital. "Hemos podido desalojarlos completamente de Trípoli". La celebración reflejó el optimismo de los insurgentes después de días de intensos combates en la capital, que ahora parece estar en su mayor parte bajo control de los rebeldes.
Simultáneamente, los insurgentes luchaban por tomar control de una ruta vital de suministros a Trípoli después de ocupar un cruce estratégico fronterizo con Túnez. La ruta costera entre Ras Ajdir y la capital es vital en momentos de creciente escasez de combustible y alimentos. Los opositores, que libran una guerra civil desde hace seis meses para derrocar a Gaddafi, han tomado control de la mayoría del país pero todavía encaran intensa resistencia en bastiones de Gaddafi cerca de la ciudad occidental de Zwara y al este de la capital.
Los insurgentes dijeron que controlan el cruce pero que leales al régimen disparan cohetes contra la carretera costera.
Efe