Feliz. Con música de mariachis, seguidores dan a la bienvenida a Gregorio Sánchez Martínez.
Después de un año y meses de estar encarcelado en el penal de alta seguridad en El Rincón, de Tepic Nayarit, Gregorio "Greg" Sánchez Martínez regresó a Cancún, en donde fue alcalde.
El exaspirante a la gubernatura de Quintana Roo fue detenido y acusado de tener nexos con cárteles y la comisión de otros delitos, de los cuales dijo aquí que fue exonerado.
"Greg" llegó al aeropuerto de Cancún, en vuelo comercial de Aeroméxico, y fue recibido con mariachis y más de medio centenar de seguidores y funcionarios de su administración.
"La victoria es de Cristo Jesús, porque de él es la gloria y la honra", expresó al alzar los brazos en señal de triunfo, frente a sus simpatizantes, la mayoría de ellos congregantes de la iglesia cristiana a la que pertenece.
Entre el tumulto que generó a su alrededor, Sánchez Martínez descartó su incursión en la política en el corto plazo y confirmó que mantiene su interés por desempeñarse como empresario y en la preparación de su proyecto cultural musical.
Dijo que no le interesa buscar responsables de los delitos que le fueron imputados ya que se dedicará a su familia que ha sido "injuriada y humillada".
"No me interesa la política ni buscar culpables; seguramente hubo responsables, pero no seré yo quien dé con ellos. Mi prioridad es mi familia que ha sido difamada y humillada", sostuvo. En tanto, los abogados que llevan su caso, quienes lo acompañaron durante el viaje, informaron que se ha declarado inocente a Sánchez Martínez en los cargos de tráfico de indocumentados sobre el cual existían dos averiguaciones previas y de delitos contra la salud.
