Caso. La esposa del fallecido accionista mayoritario de la jabonera, reclama el pago que dice, le corresponde por la venta del inmueble.
Carmen de la Garza de Valdés, cuyo esposo fue accionista mayoritario de la Jabonera La Esperanza e interventor en el añejo conflicto laboral, está reclamando el pago que dice corresponderle por la venta del terreno y que, asegura, no se le ha hecho efectivo desde 2008.
Eduardo Francisco Valdés Viesca falleció el pasado mes de agosto. Treinta días después se iniciaron los trabajos del Parque Ecológico La Esperanza, en un acto público en el que el gobernador Jorge Herrera Caldera agradeció la paciencia por la espera de concretar este proyecto a quien siempre se ha ostentado como el único propietario de la fallida empresa, Carlos Acosta Gómez.
"Creo que era lo que estaban esperando", dice Carmen respecto de la muerte de su esposo y asegura que ninguna autoridad, ni estatal ni municipal han querido responderle, por presuntos actos de complicidad con Carlos Acosta.
Recordó que desde abril de 2008, cuando el entonces gobernador de Durango, Ismael Hernández Deras junto al secretario de Gobierno, Oliverio Reza y el expresidente municipal, Ricardo Rebollo Mendoza intervinieron para coadyuvar en la solución del conflicto, se acordó la compra de bienes inmuebles e instalaciones que pertenecían a la jabonera. En ese documento, Valdés Viesca firma como representante legal de Negocios Laguna, accionista de la jabonera, con quien Acosta se comprometió a participarle de los recursos de la venta.
El siglo de torreón / Ma. Elena Holguín
Accionista mayoritario
De acuerdo con la quejosa:
⇒ Su esposo fue el accionista mayoritario y nombrado, ante notario público, como interventor en el conflicto de huelga.
⇒ Él le otorgó poderes para negociar como representante de la empresa, Negocios Laguna, pero Acosta no la tomó en cuenta.
⇒ Existe un acuerdo en el que el exacreedor Acosta, se compromete a participarle de los recursos de la venta al gobierno estatal, pero no lo cumplió.