Recuerdan a don Pablo Machuca

Don Pablo Machuca Macías (1907-1988), fue uno de los cronistas de Gómez Palacio y dejó testimonio de su trabajo a través de varios libros escritos sobre la historia de la centenaria ciudad, destaca el cronista Pablo Amaya Ramírez.

Deambulando por calles del centro histórico de Gómez Palacio, dice Amaya Ramírez, actual cronista gomezpalatino, "conocí a un hombre de corpulencia física fuerte, con su traje negro y sus inseparables lentes, que nunca imaginé fuera mi antecesor en la historia de Gómez Palacio, que conocí a través de sus excelentes libros".

Recuerda el cronista que fue en 1973, cuando levantaban el pavimento antiguo de casi 40 centímetros de profundidad, frente al mercado José Ramón Valdez y bajo la casa del comerciante libanés, señor Ale, cuando observó aquel hombre con su traje negro, que con estruendosas carcajadas festejaba la anécdota de un taxista, sin imaginar que después su libro, "En una ciudad del Norte, la Revolución de 1910", fuera el que le diera un giro a la vida de Amaya Ramírez y años después lo sucedería como cuarto cronista, "de la bendita tierra que me vio nacer".

"El libro antes descrito me llevó a convertirme en ávido seguidor de sus publicaciones al encontrarme por trabajo 16 horas diarias en la administración de empresas hoteleras por 26 años, mismos que tenía que emplear el tiempo en conocimientos de la historia de la región porque acudían extranjeros a buscar los orígenes de sus ancestros en La Laguna y había franceses, alemanes, ingleses, españoles, chinos y libaneses, lo que me llevó a trabajar en un proyecto de historia regional para la difusión de 500 años de historia en La Laguna, que empecé a trabajar desde 1990 y que prosperó gracias al apoyo moral y de difusión del inolvidable Ángel Esparza, como jefe de Redacción de El Siglo de Torreón", narra el cronista.

Parte de ese proyecto y sobre todo parte importantísima de mi vida, añade Amaya Ramírez, se convirtió la bibliografía de don Pablo Machuca Macías, "a quien honro cada año al organizarle un homenaje en el panteón de Guadalupe, de Gómez Palacio, el día dos de noviembre en honor a su persona y a los participantes de la Revolución del domingo 20 de noviembre de 1910, que he llamado 'Los olvidados', que hicieron posible que estallara el movimiento armado".

El cronista gomezpalatino dice sentirse muy orgulloso de transmitir a la comunidad el ejemplo y los trabajos de su antecesor, "a quien recuerdo con honor y respeto; el profesor don Pablo Machuca Macías".

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