La secretaria general de Partido de la Revolución Democrática (PRD), Dolores Padierna, aseguró que la remoción de Martí Batres Guadarrama, luego de que éste criticó al jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon, por asistir al V Informe de gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, no significa una fractura entre las corrientes del perredismo nacional.
Dolores Padierna se mostró cauta esta vez, y simplemente dijo que remover a Batres de la Secretaría de Desarrollo Social capitalina es una decisión de gobierno.
"Ese tema no es mío. Es tema gobierno-gobierno; partido-partido. Yo respeto las decisiones que tome el gobierno y él respeta las decisiones que tomemos en el partido".
"Yo creo que no es un tema del partido, no debemos escalar así, los dos son compañeros; no por eso vamos a hacer un lío, una división", concluyó.
Padierna descartó que la decisión de Ebrard de remover a Batres, quien reconoció su interés por buscar la Jefatura de Gobierno del DF el viernes pasado, escale y se convierta en un factor de división entre el Ejecutivo local y el ex candidato presidencial (2006), Andrés Manuel López Obrador.
"El gobierno sabrá qué decisiones toma y el partido también. Estamos en unidad y eso no nos va a dividir. Ellos que den sus puntos de vista", comentó.
Pero acotó que ella tiene su punto personal de vista respecto a que Ebrard haya asistido a este mensaje.
"No estoy de acuerdo en que se acuda a legitimar a Calderón, más aun si le hace mal a la persona que va; hay que cuidar al Jefe de Gobierno también".
"No era necesario acudir a algo extralegal, pero cada quien es libre de hacer lo conveniente y en terrenos de gobierno", manifestó.