El procurador Arturo Nahle García confirmó que, con base a los estudios de genética forense, los restos encontrados en el predio denominado Las Negritas, en el municipio de Calera, corresponden Ernesto Cordero Anguiano, uno de los cazadores guanajuatenses desaparecidos.
Sin embargo, admitió que será complicada la identificación del total de los restos, ya que en los estudios múltiples sólo uno por ciento de ellos se encuentran anatómicamente íntegros y útiles para estudio morfológico, mientras que el resto está en condiciones de deterioro extremo por efecto de la acción del calor y fuego directo, por la humedad constante y prolongada, y por efecto de la flora y fauna cadavérica.
En conferencia de prensa, precisó que esta identificación se logró por la hermandad de éste con Diego (también desaparecido), ya que hace tres semanas el personal especializado acudió a Guanajuato con el fin de tomar el perfil genético de sus familiares directos y así estar en posibilidad de determinar en forma específica la correspondencia exacta.
Recordó que en el mes de julio, el sobreviviente que escapó de sus captores, Antonio Martínez Olivares, alias “El Tongas”, de 25 años, identificó el predio “Las Negritas” en el municipio de Calera como el lugar donde fueron torturados sus compañeros. A partir de entonces la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) se avocó a la búsqueda de las ocho personas desaparecidas.
Se especificó que la investigación se realiza en materia de genética, arqueología, medicina forense y criminalística que lleva a cabo la procuraduría con el apoyo de la Unidad Académica de Antropología, especialidad en Arqueología de la UAZ, y la Universidad Autónoma de Durango.
Al emitir la postura sobre este caso, el procurador recordó que el 6 de diciembre de 2010 desaparecieron entre el municipio de Tabasco y Joaquín Amaro, Zacatecas, diez guanajuatenses pertenecientes al Club Cinegético “Caza, Tiro y Pesca Aldama”. También recordó que después de 40 días de arraigo, el 18 de enero fueron consignados siete policías preventivos de Joaquín Amaro. Así como a otro hombre quien fue detenido en el municipio de Jalpa en posesión de la camioneta Suburban en la que viajaban los cazadores de Guanajuato. Desde entonces estas personas se encuentran recluidas en el Cereso de Cieneguillas y sujetas a proceso penal.