Informa SEP de Chihuahua que los niños tendrán un lugar en el sistema educativo pero en otro plantel y deberán asistir a terapia psicológica.
La Secretaría de Educación de Chihuahua no expulsó a los seis alumnos de nivel básico que presentaron conductas violentas de forma reiterada, como lo diera a conocer el titular de la dependencia Jorge Quintana Silveyra, únicamente fueron reubicados, precisó la dependencia.
A pesar de que el funcionario fue enfático al declarar que la expulsión era necesaria para dejar asentado un precedente y cortar de raíz el acoso escolar principalmente en el nivel básico, el departamento de Comunicación de la Secretaría cambió posteriormente tal postura y afirmó que los seis niños tendrían todavía un lugar en el sistema educativo, contradiciendo a Quintana, quien definió en rueda de prensa la medida como una "expulsión definitiva".
"La educación básica es una garantía constitucional, por lo que ningún alumno puede ser dado de baja. Solamente se les asigna un lugar en otro plantel a fin de cambiar su entorno y que puedan reinsertarse en la comunidad escolar", precisó el vocero de la institución Humberto Jauregui.
Agregó que para proteger a los alumnos agresores no se darían a conocer los grados en los que estudiaban antes de ser reubicados, ya que se corre el riesgo de que sean víctimas de discriminación en sus nuevas escuelas.
La Secretaria informó que en los seis casos se trata de estudiantes que durante mucho tiempo han presentado conductas violentas hacía sus compañeros, e incluso se les señaló por golpear a otros alumnos reiteradamente.
Además de la reubicación, los alumnos deberán asistir a terapia psicológica, brindada por personal de la propia institución, se informó.
De los estudiantes expulsados o reubicados, dos viven en Juárez, dos en Parral, uno en Delicias, uno de Jimenez, y el último en la capital.
