Operativo. Elementos del Ejército mexicano desmantelaron un laboratorio para fabricar droga ubicado en la zona pantanosa del municipio de Huixtla, zona del Istmo-Costa de Chiapas.
Militares desmantelaron en una zona pantanosa del municipio de Huixtla, en la zona del Istmo-Costa de Chiapas, uno de los laboratorios para fabricar droga más grandes del sureste del país, donde fueron aseguradas alrededor de dos toneladas de drogas sintéticas, al igual que otra tonelada de precursor químico, utilizado para elaborar alcaloides.
El laboratorio clandestino, que fue abandonado por sus vigilantes al observar el ingreso de las unidades castrenses, se asentaba en un predio de 10 hectáreas del rancho Los Girasoles, en los límites de la colonia El Arenal, un área pantanosa de difícil acceso.
El narcolaboratorio estaba montado con equipos sofisticados para la elaboración de droga, conocida como cristal, que en el mercado negro adquiere valores millonarios.
El personal militar localizó unos 500 tambos de precursor químico, sosa cáustica y otros productos utilizados en la elaboración de drogas sintéticas. Al igual que 18 tambos más con el producto ya elaborado para su distribución.
Los informes indican que el laboratorio constaba de seis recipientes de alta presión de 500 litros cada uno, con capacidad para procesar 150 kilos de droga diariamente. Ocultas entre los matorrales, estaban algunas casas de campaña, baños y cocina. También una fosa séptica en la que se arrojaban residuos tóxicos.
Fueron asegurados además un camión de tres toneladas, una camioneta Nissan, una bodega de alimentos enlatados, una planta de luz, una congeladora y servicios sanitarios.
La zona fue resguardada por efectivos del Ejército y de la Procuraduría General de la República (PGR).
Versiones castrenses y de autoridades de gobierno indican que este es el narcolaboratorio más grande desmantelado hasta ahora en el sureste del país.
EL UNIVERSAL
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