En su mejor momento. El boricua lució espectacular la noche del sábado en su presentación en el Palacio de los Deportes.
MÉXICO, DF.- Con una verdadera fiesta que también cubrió de romanticismo, Ricky Martin reapareció en los escenarios mexicanos el sábado por la noche, donde pidió por el respeto a la diversidad, al mismo tiempo que abrió su corazón para mostrar quién realmente es.
Con una metáfora en video, en la cual rompe él mismo las cadenas que lo atan, Martin renació en el escenario y se dejó ver en todo su esplendor, contagiando así a las cerca de 15 mil almas que se dieron cita en el Palacio de los Deportes.
El cantante boricua realizó su primera de dos presentaciones que ofrecerá en el recinto como parte de su gira "Música+Alma+Sexo".
En medio de una ola de gritos, Martin hizo su entrada al escenario, donde sus sensuales movimientos, sus exquisitos temas y la nostalgia de sus grandes éxitos bastaron para brindar una velada inolvidable, que conforme transcurrieron los minutos se convirtió en una gran fiesta.
Un escenario plagado de luces, un andamio de tres niveles y cerca de 20 bailarines acompañaron al boricua, quien no escatimó recursos para hacer seducir a su público. Con su nuevo tema "Será será" y las palabras, "No tengas miedo a vivir, no tengas miedo a soñar", el intérprete daba la bienvenida a su público que constantemente lo ovacionó, al mismo tiempo que aprovechaba para tomarle fotos y video con sus celulares.
Vuelve, She Bangs, María, La Copa de la Vida, Fuego contra Fuego y El Amor de mi Vida, fueron parte del repertorio de la inolvidable velada.
