El día a día. Una madre llora junto al cuerpo sin vida de su hijo, un niño de año y medio asesinado durante los enfrentamientos en Libia.
Rusia podría ayudar como intermediario a conseguir la salida del poder del líder libio Muammar Gaddafi, afirmó ayer el vicecanciller Sergei Ryabkov.
Según agencias noticiosas rusas, Ryabkov dijo a la prensa en un evento suplementario de la cumbre del Grupo de los Ocho en Deauville, Francia, que Gaddafi "ha perdido su legitimidad como líder de Libia y es necesario ayudarle a que se vaya" .
Rusia está dispuesta a hacérselo saber, agregó.
"Es necesario hallar una fórmula para que Gaddafi deje el cargo, y esa medida contribuiría a resolver otras cuestiones".
Las autoridades rusas han criticado a Gaddafi, pero también se han quejado de lo que consideran un uso excesivo de la fuerza por parte de la OTAN y han exhortado al fin de las hostilidades. El canciller ruso Sergey Lavrov ha conversado recientemente en Moscú con representantes del gobierno libio y de los rebeldes.
Mijail Margelov, director del comité de asuntos exteriores en la Cámara Alta del Parlamento ruso, dijo en Deauville que Rusia acelerará contactos tanto con el gobierno de Libia como con los rebeldes. Las agencias noticiosas rusas atribuyeron a Margelov haber dicho que es necesario conversar sobre el eventual alejamiento de Gadafi con la elite política libia, quizás los mismos hijos de Gadafi.
Margelov agregó que los presidentes de Estados Unidos y Francia, Barack Obama y Nicolás Sarkozy, y la canciller alemana Ángela Merkel tenían una alta consideración por los esfuerzos mediadores rusos.
"Rusia tiene relaciones, no solamente en Libia sino en casi todo el norte del África... Podemos beneficiarnos de ese tipo de consultas y contactos con ellos" , dijo el viceasesor nacional de seguridad de Obama, Ben Rhodes, a la prensa en Deauville.
Jornada de protestas en Siria deja 3 muertos
Las fuerzas de seguridad sirias prosiguieron ayer la represión de las protestas, causando la muerte de al menos tres manifestantes en la ciudad de Dara, epicentro de las movilizaciones contra el presidente Bashar Al-Assad. Después de las oraciones musulmanas del mediodía, varias ciudades a través de Siria fueron escenario ayer viernes de nuevas manifestaciones antigobierno, la mayoría de las cuales se habría desarrollado de manera pacífica.
Sin embargo, en Dara -donde estallaron las protestas contra el régimen de Al-Assad- las fuerzas de seguridad trataron de dispersar a los manifestantes y ante la renuencia de éstos abrieron fuego contra la multitud, informó el canal árabe de noticias Al Arabiya.