Una francesa de 22 años contrajo matrimonio con el 'certificado de defunción' de su compañero, quien murió en un accidente automovilístico en 2009, en la alcaldía de Dizy-le-Gros, norte de Francia, reportó la prensa local.
Poco tiempo después de la muerte de su compañero, en octubre de 2009, Karen inició las gestiones pertinentes ante la presidencia de Francia a fin de obtener autorización para 'realizar un proyecto común', un matrimonio póstumo, lo cual fue decretado en abril pasado.
'Anthony es el padre de mi hijo de dos años, vivimos juntos cuatro años y medio y queríamos casarnos. Ese era nuestro proyecto de vida común y lo concrete hoy', relató la mujer, citada en un reporte del diario francés Le Figaro.
Rodeada de su familia cercana, Karen respondió 'sí' a la tradicional pregunta de la autoridad de ese pequeño municipio francés durante la ceremonia preparada para la ocasión, la cual fue muy sobria, y en la que el juez subrayó que 'esta unión es un acto de amor'.
El matrimonio póstumo es regulado por el artículo 171 del código civil, que estipula que el presidente de la República puede autorizar su celebración si uno de los novios muere después de iniciar los trámites, pues esto es señal de su consentimiento.
