Varios milicianos de al-Qaida se escaparon el lunes de una prisión del puerto de Aden, en el sur de Yemen, informaron funcionarios yemeníes, en la segunda fuga espectacular este año.
Un funcionario de la prisión dijo que por lo menos 10 reclusos se fugaron el lunes por la mañana a través de un túnel de 40 metros (130 pies) que excavaron los mismos presos. Dijo que se investigaba la fuga.
Por su parte, un funcionario de seguridad afirmó que fueron 15 los milicianos que se fugaron, entre ellos varios condenados por asesinato de funcionarios de seguridad y asalto a un banco.
La discrepancia en el número de prófugos no pudo ser aclarada de inmediato. Ambos funcionarios hablaron a condición de mantenerse anónimos porque no tienen autorización para suministrar declaraciones a los medios.
Yemen, la nación más pobre del mundo árabe, ha sido escenario de meses de caos político y desórdenes. Una rebelión popular contra el prolongado régimen del presidente Alí Abdulá Salé, inspirada por la Primavera Arabe, ha enfrentado una enérgica represión del gobierno.
La represión ha provocado deserciones de soldados y funcionarios que se han sumado al movimiento de protesta. Tribus poderosas también se han volcado contra el gobierno.
En Yemen opera al-Qaida en la Penísula Arábiga, que Estados Unidos considera el desprendimiento de la red terrorista más activo y peligroso. Milicianos islamistas vinculados al grupo han aprovechado el caos para tomar control de varios pueblos en el sur de Yemen.
En esta nación ha habido fugas espectaculares. En junio, casi 60 presuntos milicianos de al-Qaida se escaparon a través de un túnel de una prisión de Mukalla, al sur de Yemen.
En 2003, 11 milicianos de al-Qaida condenados por el ataque en el 2000 al buque estadounidense Cole, que mató a 17 marinos estadounidenses e hirió a 39, escaparon de la prisión de Adén y en 2006, otros 23 milicianos de al-Qaida escaparon de una cárcel en Saná.
