Por primera vez, una mujer se graduó como miembro de las fuerzas especiales de la Marina de México.
Junto a la mexicana, quien no fue identificada, egresaron 12 hombres del curso que incluye programas de paracaidismo, comando y estrés, montaña e intervención, informó en un comunicado la Secretaría de Marina.
"Un hecho sin precedente en la Armada de México", describió la Marina, una dependencia que en los últimos años ha tenido un rol creciente en el combate al narcotráfico.
La dependencia no dio más detalles y no precisó si antes estaba limitado que las mujeres entraran a las fuerzas especiales o era que ninguna se había postulado.
En los últimos años las fuerzas armadas mexicanas en general han realizado ajustes internos en favor de las mujeres.
Uno de los más significativos ocurrió en 2007, cuando el ejército abrió la puerta para que por primera vez una mujer pueda alcanzar el rango de general de división, el más alto en las fuerzas armadas del país.
A partir de una directriz del presidente Felipe Calderón, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) amplió las opciones educativas para las mujeres y a partir de 2007 han podido estudiar ya no sólo para enfermeras o doctoras, sino para pilotos aviadores e ingenieros constructores.
Además de la Marina, el ejército también participa en el combate a los cárteles de las drogas y en números mayores.
Las fuerzas especiales de la Marina han participado en algunas de las operaciones más exitosas, incluida una acción en diciembre de 2009 que culminó con la muerte de Arturo Beltrán Leyva, considerado el principal líder del cártel de las drogas que llevaba su apellido.
En total, el ejército cuenta con más de 200,000 elementos y la marina con más de 53,000, aunque no todos participan en la lucha contra el crimen organizado.
Unos 45,000 soldados del ejército participan permanentemente en operaciones contra el narcotráfico, según datos de la Secretaría de la Defensa Nacional. La Marina no ha divulgado datos exactos del número de sus efectivos en esas labores.
