Cerca de 700 policías municipales, que desde el miércoles de la semana pasada se encuentran concentrados en sus bases por disposiciones del gobierno federal, se manifestaron ante el edil Benjamín Galván Gómez por considerar que las acciones que lleva a cabo el Ejército, la Policía Federal y la Marina atentan contra sus derechos y contra las tareas que llevan a cabo de manera cotidiana.
Desde las 08:00 horas de este lunes se presentaron frente a las instalaciones de la alcaldía sin uniformes y sin armas, ya que éstas están siendo revisadas por el Ejército Mexicano.
Ante dicha situación, el alcalde los citó para platicar con ellos en el centro cívico y allí les dijo que por indicaciones del Acuerdo Nacional de Seguridad Pública que se firmó entre el gobierno federal y el estatal, todos los policías de Tamaulipas deberán someterse a una serie de exámenes, entre ellos de toxicología y de confianza, además de integrarse a un procedimiento de capacitación para poder reincorporarse a las filas de la corporación.
Algunos policías protestaron porque consideraron que la medida era injusta, pero aún así los mandos medios accedieron a someterse a dichos exámenes.
También estuvieron de acuerdo en que el alcalde les proporcionara mayor información esta tarde.
