Queja. Comerciantes de diversos tianguis y familiares de las 11 personas que fallecieron en un centro de rehabilitación exigieron justicia.
Un grupo de aproximadamente 250 personas exigió justicia y soluciones respecto a la falta de seguridad que prevalece en la ciudad, aunado al trabajo arbitrario que según ellos realizan los efectivos militares y federales.
Martha García, vecina de la colonia Lázaro Cárdenas, comentó que ella es propietaria de un puesto en un tianguis de la ciudad, y que ha vivido durante años de ese trabajo, por lo que no cree justo que lleguen los militares a la ciudad diciendo que van a acabar con el crimen organizado, cuando en realidad acaban con sus puestos, comercios que dan de comer a miles de familias en la región.
Por otra parte, otras mujeres exigieron justicia por la muerte de sus hijos, hermanos, esposos, amigos, quienes fueron atacados por un grupo de civiles armados en el interior de un centro de rehabilitación ubicado en la avenida Guerrero.
"No más muertes, no más sangre", gritaban pidiendo hablar con el alcalde Eduardo Olmos, para que éste les explicara qué fue lo que pasó la tarde del martes, cuando fueron abatidos sus familiares dentro del centro.
Ante la protesta, personal del Secretario del Ayuntamiento acudió ante las familias quejosas, y les pidió que organizaran una comisión para que ésta acudiera a una reunión con el propio secretario Miguel Mery, y así posteriormente acordar alguna cita con el alcalde.
Posteriormente, el director de Atención Ciudadana, Guillermo Covarrubias, atendió a las personas, quienes le dijeron que sólo quieren más seguridad y menos abusos.