Pese a la crisis de las deudas en Europa y la débil situación de la economía mundial, el Bundesbank, el banco central alemán, mantiene su confianza en el crecimiento económico de Alemania.
'Las condiciones internas para un crecimiento a largo plazo y de alcance amplio se quedan intactas', según señaló este lunes desde Frankfurt el Bundesbank, en su informe mensual de diciembre.
Aun así, las consecuencias de la crisis obligaron a esta institución a corregir drásticamente las perspectivas de crecimiento para 2012 y se espera ahora que el Producto Interno Bruto (PIB) de Alemania crezca tan sólo 0.6 por ciento.
El Bundesbank recordó que a lo largo de este año se alcanzó un crecimiento del tres por ciento.
'Estas previsiones se basan en que no haya ningún empeoramiento significativo de la crisis de las deudas. En el escenario base hasta se considera que la inseguridad de los inversionistas disminuya'.
Si es así, entonces la economía alemana, apoyada por una fuerte política monetaria y por la economía mundial, podría volver pronto a un crecimiento robusto.
Bajo estas condiciones, según el Bundesbank, en 2013 la economía alemana podría volver a crecer y registrar el próximo año el 1.8 por ciento.
A favor de este escenario está también el desarrollo de los precios: si en 2011 los precios crecieron 2.5 por ciento, para los próximos dos años se espera un aumento inferior, respectivamente del 1.8 y 1.5 por ciento.
En particular, el encarecimiento de los bienes importados, en especial la energía, debería, según las previsiones del banco central, mantenerse dentro de ciertos límites.
La inseguridad acerca del desarrollo económico del futuro 'es grande' según el Bundesbank, pero si se logra combatir la crisis fiscal con las reformas pactadas y ganar la desconfianza de los inversionistas, 'el crecimiento en Alemania podría ser más alto'.
Por esto el Instituto no se espera una caída de la economía alemana, que podrá seguir creciendo en particular apoyada por la fuerte demanda interna y por los pedidos a la industria.
'Alemania cuenta actualmente con una base empresarial sana. Esta se encuentra en un buen momento de crecimiento que desde 2010 se extendió a lo largo del año en curso'.
'En un entorno económico difícil, hay (en Alemania) un gran potencial de resistencia', según esta institución.
A pesar de las previsiones del Bundesbank, muchos expertos alemanes están convencidos de que la economía podría retroceder en el tercer trimestre de 2012, por primera vez desde la crisis en 2008/2009.
