La nave militar C-17 Globemaster III, de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, aterrizó el pasado jueves en esta capital, pero el viernes se supo que permanecía varada porque personal de Aduana descubrió que pretendía ingresar armamento sin registro.
El cargamento estaba destinado para cursos de entrenamiento de la Policía Federal, pero el equipo que llegó no coincidía con el inventario enviado por el propio gobierno estadunidense, lo que obligó a una revisión de la Aduana y la Cancillería argentina.
El domingo, el diario Página 12 informó en exclusiva que entre el cargamento había una maleta sin declarar que fue abierta a la fuerza y que contenía material militar y drogas, mismo que fue incautado. EU expresó en un comunicado su malestar por el modo con el que el gobierno argentino manejó el caso “.