América se colgó de la portería y venció 5-4 al Puebla y le regalaron su victoria número 100 a Carlos Reinoso en el cierre de la fecha 12 del Torneo de Clausura 2011.
De pronto, cual espejismo, el tétrico panorama que había disfrazado Carlos Reinoso previo al choque contra el Puebla, debido al anuncio de múltiples lesionados en El Nido de Coapa, se transformó en una fiesta de goles y de futbol que impulsó el triunfo 100 del Maestro en torneos de Liga con su equipo, las Águilas del América.
Inesperadamente, el portero Guillermo Ochoa, el central colombiano Aquivaldo Mosquera y el contención brasileño Rosinei Adolfo aparecieron en la grama del Estadio Azteca.
El arquero dio seguridad en su zona; el zaguero detuvo los tibios avances camoteros y el amazónico, veloz y preciso, distribuyó toque y clase como si no hubiera tenido molestia alguna.
Y en ese concierto futbolístico, el estratega chileno recuperó a su ataque favorito, armado por Ángel Reyna, Vicente Sánchez y Daniel Rolfi Montenegro, para dejar en el banquillo a Matías Vuoso.
La fórmula se conectó mágicamente, al extremo de que Ángel elaboró el primer hat-trick de su vida y se convirtió en el líder de goleo del Clausura 2011, con nueve anotaciones.
La vibrante y emotiva actuación terminó con un histórico 5-4, que selló la reconexión goleadora con su fanaticada, la cual respondió con una asistencia superior a los 30 mil seguidores.