La Procuraduría General de la República (PGR) añadió una investigación por crimen organizado al proceso que sigue contra el exalcalde de Tijuana, Jorge Hank Rohn y otras 10 personas detenidas por acopio de armas.
La PGR amplió de 48 a 96 horas el término para definir la situación legal del también empresario de casas de juego, quien fue detenido en su casa donde almacenaba 88 armas, la mayoría de ellas de posesión prohibida.
Según la PGR, la investigación por crimen organizado se justifica por el número de personas detenidas en un operativo del Ejército el sábado por la madrugada.
La PGR señaló que la ampliación del plazo legal para Hank y sus escoltas es "mientras se deslinda su participación en la comisión del delito de delincuencia organizada, con el cual pudieran estar relacionados por el número de personas detenidas en flagrancia y por el tipo de armas que fueron aseguradas".
Mientras tanto, agentes de la PGR realizaron ayer un cateo en la casa de Hank en Tijuana para revisar objetos dentro de la propiedad.
El cateo se realizó al mismo tiempo que la esposa de Hank, María Elvira Amaya, arribó con una orden judicial para que el Ejército les devolviera el resguardo de la vivienda.
Hank aseguró que el Ejército "sembró" las armas en su casa, y ayer su esposa acusó que en la detención se dieron "muchas irregularidades" que quedarían expuestas en los videos de vigilancia de la casa.
Amaya admitió que el personal de seguridad de la familia sí porta armas, pero "con mucha discreción".
Con el anuncio de la PGR, el excandidato del PRI a la gubernatura de Baja California tendría que combatir dos delitos graves: delincuencia organizada y acopio de armas, pues la mitad de ellas eran de calibres de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.
Mientras dirigentes partidistas debatían sobre el tinte político de la detención de Hank, el vocero del Gobierno Federal para seguridad, Alejandro Poiré, afirmó que el presidente Felipe Calderón no ordenó el operativo de Tijuana y sólo se enteró cuando el Ejército lo reportó.
"Se enteró como nos fuimos enterando todos, después de los resultados de los eventos", dijo Poiré al insistir que el operativo fue resultado de una denuncia anónima sobre la que actuó el Ejército. (Con información de Frontera de Tijuana)