Convención. Mujeres republicanas doblan las camisetas de la convención realizada el fin de semana en Arizona.
Simpatizantes del "Tea Party" llenaron el fin de semana el centro de convenciones de Phoenix para escuchar a dos posibles contendientes a la nominación presidencial republicana del próximo año, una elección que ese movimiento conservador está determinado a modelar después de ayudar a que los republicanos cosecharan grandes triunfos en las elecciones intermedias.
El ex gobernador de Minnesota, Tim Pawlenty, buscó impresionar a más de 2,000 miembros del grupo "Patriotas del Tea Party" con un llamado a todo pulmón a "recuperar nuestro país". También habló el legislador de Texas Ron Paul, quien ya ha sido abrazado por miembros del Tea Party. El segmento de votantes comprometidos podría resultar vital para quienes aspiran a llegar a la Casa Blanca, pero se trata de un público que es escéptico de los políticos que cortejan su respaldo. "Ellos son buenos oradores. Saben qué decir para inspirar a la audiencia. Pero estoy buscando sustancia que aún no he encontrado", dijo el jubilado Kaye Woodward, de Livingston, Texas, quien ha sido un puntal de los actos del Tea Party, desde Washington a El Álamo. "No he estado súper entusiasmado con un candidato desde hace bastante tiempo. Estoy buscando alguien que diga la verdad, y no estoy seguro de haber encontrado uno todavía", comentó. Los activistas del Tea Party son una coalición de grupos comunitarios conformada por estadounidense con puntos de vista considerados de derecha. Creen que el gobierno ha crecido demasiado y amenaza las libertades individuales.
Riesgos por nueva Ley
The New York Times advirtió que una serie de legislaciones que Arizona aprobó en bloque preliminarmente esta semana 'no resolverán nada y crearán mucho daño'. 'Esperamos que los arizonianos coléricos y el resto del país retomen pronto sus valores' tradicionales sobre la migración, destacó el diario, ya que 'la ciudadanía estadounidense por nacimiento y la asimilación de lo recién llegados son clave para el experimento estadounidense'. 'Todo lo que separa a los nuevos inmigrantes de los anteriores es la ausencia de un sistema que funcione para asimilarlos'.