Risa nerviosa. El presidente de EU, Barack Obama, la líder de de la minoría Nancy Pelosi, el vocero de la Cámara de Representantes John Boehner y el líder de la mayoría del Senado Harry Reid .
Mientras el tiempo se agota y las advertencias se hacen más desesperadas, ayer surgieron las primeras y frágiles señales de una posible solución para elevar el límite de la deuda nacional y evitar una moratoria de pagos potencialmente catastrófica el 2 de agosto.
Bajo un plan discutido por los dos principales líderes del Senado, el presidente Barack Obama recibiría una mayor autoridad para elevar el límite de endeudamiento y al mismo tiempo se pondría en marcha los procedimientos para hacer recortes en el gasto federal.
La versión de que líder de la mayoría Harry Reid, demócrata por Nevada, y el líder republicano Mitch McConnell, de Kentucky, estaban trabajando en el plan alternativo se divulgó mientras Obama y líderes del Congreso sostenían conversaciones sobre la deuda en la Casa Blanca por quinto día consecutivo.
McConnell declaró que había sido una buena sesión. "Vamos a seguir discutiendo el camino a seguir en los próximos días y ver qué pasa", dijo. Obama dará su punto de vista hoy, cuando la Casa Blanca tenga programada su segunda conferencia de prensa de la semana.
Republicanos y demócratas de la Cámara de Representantes programaron reuniones a puerta cerrada para revisar los recortes de gasto y los aumentos de impuestos propuestos por uno u otro lado hasta ahora.
Tras semanas de agitación política, parecía que los intentos de evitar un incumplimiento se adelantaban por dos vías: las negociaciones de la Casa Blanca que parecían cerca de su fin, y el plan alternativo, que representa la mejor oportunidad para evitar la crisis, según dijeron funcionarios en privado.
Sin embargo, ayer al cierre de esta edición Standard & Poor's advirtió que hay un 50% de probabilidades de que degrade la calificación crediticia del gobierno de Estados Unidos en los próximos tres meses debido al estancamiento en las negociaciones con el Congreso para aprobar un incremento en el límite de crédito. La agencia calificadora dijo que colocó a Estados Unidos en un período de observación con al menos una de dos probabilidades de que baje la calificación de deuda del país en los próximos 90 días. La decisión de S&P es la segunda advertencia en los pasados dos días, ya que Moody's Investors Service anunció que estaba revisando la calificación triple A de los bonos del gobierno.
Ap
MITCH MCCONNELL
Líder del partido Republicano
STANDARD & POOR'S