El impacto económico provocado por el terremoto y el tsunami en Japón hace dos semanas ya empieza a tener un efecto en la Comarca Lagunera, donde el sector de autopartes ha visto una baja en los pedidos para la industria japonesa, según la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra).
Aunque el efecto aún no se ha calculado y no se estima que sea grave, la Canacintra señala que han disminuido pedidos de productos fabricados en la región, como bolsas de aire, vestiduras y arneses, que se envían a Japón, donde la producción automotriz está prácticamente detenida.
El presidente de Canacintra, Mario Lozoya, afirmó que algunas empresas de autopartes "ya están resintiendo los efectos (de la situación japonesa) con paros en las producciones".
"Hay una baja en los pedidos de componentes de autopartes que se elaboran localmente", dijo.
Lozoya aseguró que también se ha afectado el envío de insumos desde Japón a plantas de otros países, aunque admitió que no tienen datos precisos de esta afectación y que no anticipan que el impacto sea severo.
Según Lozoya, se estima que el ritmo de producción tardará hasta un año en restablecerse.
Sin embargo, el director de Fomento Económico del Municipio, Fernando Félix, expresó una opinión diferente y descartó un impacto severo por la desaceleración de la industria japonesa.
Félix dijo que las empresas locales de autopartes trabajan con insumos producidos en Estados Unidos y afirmó que empresas japonesas en la región, como Takata o MasterTrim, que fabrican bolsas de aire y vestiduras, respectivamente, podrían aprovechar un aumento en la demanda de marcas estadounidenses, como Chrysler, General Motors y Ford.
La parálisis en la industria automotriz japonesa ha afectado las operaciones de Honda en Jalisco y de Nissan en Aguascalientes. En el caso de Coahuila, las armadoras estadounidenses instaladas en Ramos Arizpe no han sufrido afectaciones.
El Gobierno japonés estimó ayer que el costo del terremoto y tsunami que devastaron parte del país el viernes 11 de marzo, será de 310 mil millones de dólares.
También prevén una contracción de la economía japonesa el próximo año, principalmente por la baja en la industria de la manufactura derivada de los cortes de energía eléctrica.
