APRENDIENDO A PATINAR
Cuando los niños están aprendiendo a patinar, abundan en la casa las rodillas y los codos raspados, pues no todos son capaces de mantenerse firmes sobre sus pies durante las primeras semanas de aprendizaje. Por lo tanto no habrá más remedio que buscar la manera de disminuir las consecuencias hasta donde sea posible. He aquí una idea para que el daño de esas caídas se reduzca un poco: busque entre los mismos calcetines de los niños que haya descartado ya porque están gastados del pie o rotos de alguna parte de la pantorrilla, los más largos, de preferencia los que llegan hasta la rodilla. Córteles esta parte, que siempre es elástica y que si todavía tiene bastante firmeza les proporcionará magnífica protección, y haga que cuando vaya a patinar la usen para proteger codos y rodillas de dolorosos raspones y desprendimientos de piel.
CONSEJOS PARA LAS NIÑERAS
Tenga una sugerencia para las niñeras. Cuando los niños se aburren y se desesperan, lo que usted necesita es algo que mantenga su atención. A los niños les gustan las calcomanías y crayones. Cuando tenga que cuidar algunos niños, lleve consigo calcomanías y crayones. Lleve también algunas tarjetas, unas pocas calcomanías de colores y crayones. Pegar calcomanías en las tarjetas y después hacer diseños alrededor de ellas con los crayones es divertido para ellos y los mantiene ocupados un tiempo.
DIVIRTIENDO A LOS CHICOS EN DÍAS DE LLUVIA
Tenga preparada para esos días en que no pueden salir a jugar a causa del mal tiempo, una caja de juguetes especialmente para estas ocasiones, a la que añadirá de cuando en cuando algunos juguetes nuevos, como libros para iluminar, rompecabezas, lápices de colores y juegos, en que puedan entretenerse ellos solos sin ninguna ayuda. Esperarán ansiosos la lluvia y se irán rápidamente a casa al salir de la escuela para ver qué novedades encuentran en su caja. Su gozo aumentará al máximo si usted tiene junto a ella un tarro de chocolate caliente y espumoso y si es posible palomitas de maíz.
UN BUEN ARCHIVO DE RECUERDOS
¿Tiene usted montañas de recuerdos de los que nunca disfrutan ni usted ni los suyos porque cuesta trabajo bajar las cajas del clóset para explorar lo que hay en ellas? Mejor haga álbumes para que pueda hojearlos cada vez que quiera o para mostrarlos a sus familiares. Pegue en sus hojas, en el orden en que los reciba, invitaciones de bodas, tarjetas de bautizo, de primeras comuniones, recordatorios de defunciones, anuncios de graduaciones y de nuevos arribos, artículos de periódico de interés para alguien de la familia, eventos históricos y, en fin, todos aquéllos que quiera recordar en particular. Además puede pegar todas las fotografías recibidas y tomadas durante el año y las tarjetas de felicitación de cumpleaños y aniversarios. Es grato hojear estos libros después de un tiempo y enseñarlos a los hijos grandes.
CUANDO COMIENZA A FALLAR LA MEMORIA
Llega una época en nuestra vida en que comenzamos a olvidar cosas, pero no debemos aceptarlo como lo más natural, como una consecuencia irremediable del proceso de envejecimiento, sino buscando formas que nos ayuden a no olvidar. Por ejemplo, cuando escriba car-tas que lleven algunos inclusos, no se exponga a cerrarlas, dejándolas fuera. Rotule primero el sobre, ponga los timbres correspondientes y a medida que vaya mencionando lo que adjunta, métalo inmediatamente en el sobre mientras termina su misiva.
