Los sureños, más acostumbrados al sol que a la nieve, intentaban el lunes superar un temporal invernal que dejó varados a miles de conductores, provocó cortes de electricidad en miles de viviendas y derivó en la muerte de cuatro personas en accidentes automovilísticos.
Hasta unos 22 centímetros (nueve pulgadas) de nieve cubrían estados desde Luisiana a las Carolinas, una región en la que muchas ciudades tienen sólo un puñado de máquinas quitanieve, y algunas ni siquiera poseen una.
Y sus problemas aún no terminaban: la nieve se estaba transformando en una lluvia gélida en varias áreas, amenazando con volver más resbalosas las vías en zonas que no estaban preparadas para esta situación.
"Si estás fuera de las avenidas principales, es una pista de patinaje", dijo Tim Loucks, gerente de una estación de camiones en Haughton, Luisiana.
La tormenta paralizó a la mayoría de las ciudades y pueblos, obligó al cierre de gran cantidad de comercios y a la cancelación de casi todos los viajes en el aeropuerto internacional Hartsfield-Jackson de Atlanta, el más transitado del mundo. Más de 2.000 vuelos fueron postergados en el sur del país.
Al menos cuatro personas murieron en accidentes en las vías debido al temporal. Dos mujeres fallecieron en choques contra árboles en Luisiana y otras dos personas murieron en condiciones similares en Oklahoma.
"El problema aquí es que no están acostumbrados a esto (la nieve), por lo que los equipos y la limpieza de la basura y el retiro de la nieve no están realmente enfocados en este tipo de situaciones", dijo Tino Grana, un residente de Nueva York de 48 años, quien viajó a Atlanta para vender piezas de arte en un evento local.
"No había nadie en la vía, sólo los neoyorquinos locos, supongo", agregó.
Atlanta, donde cayeron entre 10 y 18 centímetros (cuatro a siete pulgadas) de nieve sólo tiene ocho máquinas quitanieve. La ciudad contrató un flota de 11 camiones para ayudar a rociar sal y grava.
Los consumidores temerosos vaciaron los anaqueles de los supermercados, mientras que las familias que sufieron interrupción en el servicio eléctrico temblaban en casas oscuras.
El temporal invernal empezó a desplazarse por el sur del país el domingo, colocando una manta de nieve y aguanieve sobre puentes y calles. Los gobernadores de Luisiana, Alabama, Georgia, Tenesí y Carolina del Norte declararon emergencias en sus estados y las clases se cancelaron en escuelas y universidades.
Funcionarios de Transporte reportaron cientos de accidentes y exhortaron a los conductores a permanecer en casa.
No se prevé que las condiciones mejoren pronto, pues los pronósticos indican que las temperaturas seguirán siendo heladas y caerá más nieve, lo que implica que las vías continuarán siendo peligrosas para los automovilistas hasta al menos el martes.
