Reparaciones.Imagen en que un avión es reparado en una pista de aterrizaje. ARCHIVO
El constante incremento en el precio del petróleo, que ya ronda los 100 dólares por barril, pone en riesgo la supervivencia de aerolíneas que operan con aviones viejos, debido a que desencadenaría una aniquilación natural en la industria global, aseguró José Luis Garza, director general de Interjet.
Explicó, sin embargo, que el alto precio de la turbosina no es la única amenaza para esas líneas aéreas, pues también están los altos precios que imponen los aeropuertos.
Aceptó que el mayor costo para una firma aérea es el precio del combustible, el cual representa hasta 25% de sus gastos, de ahí la necesidad de contar con motores y aviones nuevos que otorgan ahorros entre 10% y 15%.
"El combustible es un factor determinante y llega a ser crítico a partir de los 100 dólares por barril; ahorita que anda en esos precios representa entre 25% y 26% de los costos de Interjet, porque contamos con aviones nuevos, pero hay otros, de generaciones anteriores que no tendrán posibilidades de soportarlo", afirmó el empresario.
En entrevista, el directivo manifestó que cuando las aerolíneas comienzan a ver que el precio del combustible les representa 40% de sus costos, sólo tiene dos alternativas: "o suben sus precios para ubicarse en estándares más eficientes, o se resignan porque su avión es una aeronave chatarra". Grupo France-KLM coincidió al señalar que se trata de un factor determinante para la industria aérea puesto que las aeronaves son grandes consumidoras de combustible.
Descartó sin embargo, que exista un precio tope, puesto que todas las aerolíneas se esfuerzan para impactar, lo menos posible, la tarifa ofrecida al cliente final.
José Luis Garza no descartó la posibilidad de que a partir de los 100 dólares se comience a observar una aniquilación natural en la industria a nivel global, pero de las aerolíneas que no operen con tecnología de punta.