Nuevo fracaso para Santos Laguna que anoche, en Aguascalientes, perdió 1-0 ante un Necaxa que parecía condenado al descenso casi desde que inició la temporada, pero desde la quinta fecha, cuando destituyó a Brailovsky y puso a dirigir a Sergio Bueno todo cambió, desapareciendo las derrotas.
En la quinta fecha, apenas tomó el mando Sergio Bueno, la actitud de los jugadores cambió diametralmente en la cancha, y ante el Morelia se logró ya el primer punto empatando a cero, y luego los Hidrorrayos derrotaron nada menos que al América 1-0.
Y para seguir reafirmando el cambio total, los de Aguascalientes fueron a la Bombonera a ganarle también al Toluca, y para seguir buscando la salvación, anoche se impusieron con su buen futbol a un Santos Laguna que sigue descontrolado, desubicado y sin entrega.
Podría echarse toda la culpa a la directiva o al nuevo técnico, pero también habrá que analizar cómo está comportándose el equipo en la cancha, no de ahora sino de hace varias jornadas, especialmente en el sector defensivo, donde Íñiguez apenas entrando encontró ayer el camino del gol.
Santos sigue perdiendo puntos aparte del piso, que ya se le escapó de los pies y tendrá que empezar a remar contra la corriente precisamente ante el América, después con Toluca y luego ante Morelia, los equipos de los que se ha valido Sergio Bueno para mostrar que puede salvar al Necaxa.
En la Comarca hay ya intranquilidad por el bache en que ha caído su equipo, y será interesante estar esta tarde en el auditorio del Territorio Santos Modelo para ver la presentación del nuevo técnico, a quien le han dado una papa mucho muy caliente.
Mruelas@elsiglodetorreon.com.mx
