Gracias al poste izquierdo de la cabaña de Oswaldo Sánchez, que evitó dos goles más, uno de Sinha y otro de Néstor Calderón, Toluca solamente pudo anotarle tres goles al "dormido" Santos Laguna, que sigue dando lástimas junto con su nuevo técnico en este torneo.
Si con Rubén Omar Romano el equipo de la Comarca fue perdiendo piso y partidos, con el también argentino Diego Cocca se ha desmoronado casi por completo, recibiendo nuevamente goles de vestidor, pues salta a la cancha adormilado, temeroso y como el carrizo.
Y mire que hombre por hombre Santos es un equipo bien conformado pero pésimamente dirigido, que ha perdido la confianza de ir al ataque, haciéndolo todo por el centro y lo peor es que su zona defensiva se ha convertido en un puente salvador de todos los equipos, por muy mal que anden.
Si no se pone orden lo que resta de este torneo, servirá para que Santos Laguna siga perdiendo ese gran colchón de puntos que dejó Daniel Guzmán en la tabla de porcentajes y empezarán de nuevo los problemas de descenso, a menos que la directiva vuelva a ponerse las pilas y reaccione.
Qué errores tan grandes en la defensa, algo que señalamos desde hace mucho tiempo, sin que ningún técnico argentino se dé por enterado. Ojalá se convenzan los señores de pantalón largo que la solución no la tienen los que vienen de fuera y ni siquiera conocen a los jugadores.
Y mire que en Santos Laguna los sueldos siguen al día, sin descuento alguno para técnico, auxiliares turísticos y jugadores. Pero las excusas y las promesas estarán en la boca de los culpables nuevamente, mientras que la afición está perdiendo la paciencia.
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