Esta vez, Santos Laguna no tuvo rival al frente, pues Puebla fue una caricatura de lo que conocemos del conjunto de la franja, sobre todo del tiempo de Sánchez Solá, "Chelis", así que casi sin despeinarse, con el estilo dormilón de Daniel Ludueña quien anotó dos golazos, Santos ganó 4-0.
La cancha estaba muy maltratada y antes de las siete de la tarde parecía el lugar muy solitario, pero conforme fue avanzando el encuentro, la clientela casi abarrotó el bello gigante del nuevo sector lagunero, divirtiéndose y gozando con un conjunto ya enrrachado.
No había mucho esfuerzo de parte de los laguneros, a los que "El Hachita" les marcaba el ritmo, como diciéndoles tomen las cosas con calma y ahí les va el primero, y luego el segundo, que fue un poema, con un trasteo, embrujo del rival y pelota adentro.
Lamentablemente apareció la lesión de Oribe Peralta, quien en el mismo primer tiempo salió, supliéndolo "Chucho" Benítez quien anotó el tercero y para redondear la tarde, el cuarto lo anotó el muchachito Toledo quien acaba de ingresar, poniendo el último clavo al ataúd.
El partido lo gozaron con gusto y tranquilidad los muchos aficionados que también seguían el acontecer el encuentro entre Toluca y Chivas, esperando la caída del Rebaño, pero éste está ganando por todas partes y ahora espera a Santos el sábado.
Pero bien por este despertar del conjunto de la Comarca, con lo que Diego Cocca sigue afirmándose en el timón, dándole respiros a Alejandro Irarragorri que tanto creyó en este joven argentino con el que tiene amistad.
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