Los gobiernos de los estados utilizan el Fondo de Aportaciones para la Educación Básica (FAEB) para pagar de todo... aunque no esté permitido.
Lo mismo compran muebles, uniformes, libros o medallas, que rentan aerotaxis o camiones, pagan fiestas, boletos de avión y hacen donativos. Cerca de 95 por ciento de los 220 mil millones de pesos del FAEB se usan para pagar la nómina de los maestros federalizados, pero el resto funciona como una especie de caja chica para los gobiernos estatales para gastos no autorizados.
En 2009 comenzó a operar el Acuerdo Secretarial 482 que regula el uso del FAEB --el fondo más grande que se transfiere a los estados, el cual prohíbe dar apoyos al sindicato, pagar renta de autos, eventos, gastos de Comunicación Social y cubrir plazas con funciones distintas a la educación. El acuerdo señala que el dinero se debe usar exclusivamente para pagar la nómina de educación inicial, indígena, básica y normal y se pueda prestar el servicio educativo, así como para operar el padrón de maestros y los concursos de oposición para el ingreso al servicio docente. El informe de la Cuenta Pública 2009 de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) revela que en Aguascalientes se utilizaron 2 millones 466 mil pesos para la compra de muebles de la Secretaría de Gestión e Innovación, además de terrenos y vehículos para rifas del Día del Maestro.
Juan Pardinas, director del Instituto Mexicano de la Competitividad, aseguró que el mal manejo hace urgente revisar el marco legal que rige las labores de la ASF para fortalecer las sanciones.
