Sin cambio. Las instalaciones de la Casa Club de la Tercera Edad ya resultan insuficientes para los usuarios de los diferentes talleres.
El cambio de instalaciones es urgente. Y es que cada vez son más los usuarios que acuden a diario a los diferentes talleres que se ofrecen en la Casa Club de la Tercera Edad, que dependen directamente del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) y que aún no tiene fecha para mudarse al antiguo edificio del Hospital General.
SATURADO Y DEFICIENTE SU EDIFICIO El lugar recibe en promedio a más de 100 personas pues además de acudir a los diversos talleres entre ellos el de manualidades y el de yoga, también acuden pacientes a la Unidad Básica de Rehabilitación (UBR), área que comparte sus reducidas instalaciones.
Además de insuficientes, según algunas de las usuarias de la Casa Club, quienes externaron su inconformidad, las instalaciones son deficientes, ya que aseguran que pueden representar un peligro para los adultos de avanzada edad que asisten con regularidad, pues no están acondicionadas ni para atender a personas con capacidades diferentes ni dificultad para caminar.
Las rampas de acceso están acondicionadas con viejas maderas, las cuales resultan inseguras y más que brindar un servicio pueden ocasionar un accidente.
Motivo por el que los usuarios consideran necesario contar con instalaciones más amplias.
Aunque la presidenta del DIF, Elizabeth Meredith, ha anunciado en diversas ocasiones que será la Casa Club, la primera dependencia que se cambie a las antiguas instalaciones del Hospital General, aún no se tiene una fecha establecida para hacerlo, pues argumenta que el edificio aún sufre algunas reparaciones.
Mientras tanto, los usuarios sufren por las reducidas instalaciones en tanto no se informe de cuándo se realizará el cambio.
Comparten
Las instalaciones de la Casa Club de la Tercera Edad:
⇒ Resultan insuficientes para los usuarios.
⇒ Comparte sus instalaciones con la Unidad Básica de Rehabilitación.
⇒ No hay fecha para realizar el cambio de instalaciones.
