Vaqueros Laguna se quitaron la barrida y vencieron anoche a los Rojos del Águila por pizarra de 7-3. (Ramón Sotomayor Covarrubias)
Juan Salvador Delgadillo lanzó pelota de 5 imparables durante 8 entradas, y aunque recibió su octavo cuadrangular de la temporada y le endilgaron 3 anotaciones, la ofensiva de Vaqueros Laguna fabricó un rally de 4 en el cierre de la octava tanda para triunfar anoche por pizarra de 7 carreras a 3 sobre los Rojos del Águila de Veracruz, en el tercer juego de la serie que se llevó a cabo en el Estadio de la Revolución.
De manera inmediata, en la misma primera entrada, los Rojos del Águila tocaron el pitcheo de Juan Delgadillo, anotando par de carreras para colocarse adelante en la pizarra. El ataque comenzó con base por bolas a Jorge Guzmán, cuando ya había 2 outs, producto de una vistosa jugada de doble play. Vino enseguida el dominicano Víctor Díaz para sonar un cañonazo que libró la barda del jardín izquierdo-central; fue el jonrón número 15 de la temporada para Díaz, quien es el máximo tumbabardas de la Liga Mexicana.
Los de casa respondieron con una anotación en el cierre del episodio sobre los lanzamientos de Joel Vargas, quien abrió el encuentro por los jarochos. Dionys César abrió tanda con batazo de dos estaciones, bien colocado hacia el jardín central, superando el esfuerzo del guardabosque Jovani Rosario. César avanzó a la antesala con sencillo de Ramón Ramírez y timbró con fly de sacrificio, cortesía de "El Negro de Guaymas" Miguel Ojeda.
A partir de entonces, los pitchers se trenzaron en un tremendo duelo de pitcheo, desquiciando a los bateadores rivales y ofreciendo un buen espectáculo de serpentinas para el numeroso grupo de aficionados que acudieron al parque de pelota. Aparecieron los ceros en la pizarra hasta que llegó el cierre de la quinta entrada, cuando Roberto Saucedo despertó de su letargo con el bate, y apenas 2 días después de salir de la lista de lesionados, sacudió a Vargas con su segundo bambinazo de la temporada, fue sin gente en los senderos, y sirvió para decretar el empate en la pizarra.
El Águila retomó la ventaja con una rayita en la fatídica séptima entrada, cuando con uno fuera, el camarero Rufino Candelario pegó un triple a lo profundo del jardín derecho, y aprovechó sacrificio de Héctor Hernández para llegar a la registradora en jugada de pisa y corre. Pero poco les duró el gusto a los visitantes, ya que en el fondo del episodio, los naranjas volvieron a emparejar el score: Saucedo inició tanda con doblete por el jardín izquierdo, entrando Julián Laureán como corredor emergente. Leobardo Moreno entró a relevar al abridor Vargas, y dominó a Jesús Romo, aunque no pudo evitar que Laureán se colara hasta la antesala. El manager Daniel Fernández jaló por otro relevista, el derecho Luis de la O, quien fue recibido con sencillo remolcador del veracruzano Santiago González, decretando la parejera a 3 carreras por bando.
El tabasqueño Delgadillo continuó con su concierto sobre la lomita y colgó el cero en la octava tanda, para que en el complemento del inning, sus compañeros le apoyaran con el ataque definitivo de 4 anotaciones.
